Las 375 unidades del McLaren P1 están todas vendidas, de hecho su fabricación terminó hace unos meses, pero a McLaren no le ha importado y se ha llevado un McLaren P1 al Salón del Automóvil de Ginebra sin pintar… sí, sin pintar, pero porque no le hacía falta. McLaren quería rendir homenaje a su superdeportivo híbrido y brillar por encima de sus competidores, dejándonos este espectacular McLaren que quedará entre una de las configuraciones más exóticas realizadas por el departamento McLaren Special Operations.
Estamos muy acostumbrados a que los deportivos y superdeportivos de más alto nivel estén fabricados con fibra de carbono, parcial o completamente, pero haciendo un uso extensivo de este material para ofrecer mínimo peso y máxima resistencia. Pero por regla general, todos los fabricantes pintan sobre la fibra de carbono para así cumplir con los deseos de sus clientes. Hasta hace no mucho, pintar la fibra de carbono era un proceso difícil, pero a día de hoy el grado de calidad alcanzado es tan alto como si empleamos otros materiales plásticos o metálicos.
Pero hace un par de años comenzó una moda que quería dejar al descubierto la fibra de carbono para así remarcar el carácter exclusivo de este tipo de vehículos. Lamentablemente, no pintar la fibra de carbono limitaba a tu vehículo a lucir un único color negro, el color propio de la fibra. Aunque el resultado es bastante espectacular, las exigencias de los clientes no cesaron y así comenzaron los fabricantes a investigar cómo pintar la propia fibra de carbono para así conseguir que el material luciera color manteniendo el trenzado original de la fibra.
Koenigsegg, Ferrari, Bugatti y McLaren han sido los fabricantes pioneros en eso de combinar colores sobre la propia fibra de carbono, pudiendo así ofrecer un resultado final tan espectacular como único. Este tipo de procesos suponen un importante desembolso extra para los clientes, ya que el tratamiento de la fibra carbono, su lacado y finalización se trata de un proceso totalmente diferente. El McLaren P1 by MSO mostrado en Ginebra es el último gran proyecto de este tipo, empleando el color «Lio Blue» en el lacado de la fibra de carbono, consiguiendo así mostrar una carrocería desnuda con una terminación espectacular.
Como apunte extra, nada mejor que escuchar al fundado de Koenigsegg cómo aplican este proceso en el Koenigsegg Agera:
Fuente: McLaren | WCF
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