Con motivo del reciente comienzo del campeonato de resistencia WEC 2016, Aston Martin ha querido rendir homenaje a todas las citas de calendario solicitando a su departamento de personalización Q by Aston Martin un curioso trabajo artesanal que bien merece la pena ser conocido. El emblema de un fabricante de coche es intocable, ahí reside toda su esencia, pero Aston Martin ha querido ofrecer algo diferente en su Aston Martin Vantage GTE y éste ha sido el resultado.
La creación de cada uno de los emblemas que emplea cada modelo de Aston Martin, sea de competición o no, emplea un proceso artesanal donde láminas de acero son prensadas y posteriormente endurecidas para convertirse en el punto de partida del clásico símbolo de Aston Martin. Los cambios de esta edición especial tienen que ver con el posterior tratamiento, donde Aston Martin abandona sus clásicos tonos verdes, negros y blancos para acoger las tonalidad de cada una de las banderas que acogerá una prueba del campeonato WEC 2016.
De este modo, 9 diseños diferentes para crear este homenaje: Reino Unido, Bélgica, Francia, Alemania, México, EE.UU., Japón, China y Bahrain. El proceso de pintado, lacado y pulimentado es un trabajo manual realizado por los especialistas de Q by Aston Martin en colaboración con la joyería Quarter en Birmingham. El resultado final no puede ser mejor, convirtiéndose en uno de esos detalles que quedarán en la historia de la competición y de la marca.
Pero no hay que olvidar que este trabajo de Aston Martin tampoco es nuevo, y es que aunque alterar el emblema de una marca es algo a lo que muy pocos fabricantes se atreven, Aston Martin y su departamento Q by Aston Martin ya nos tienen acostumbrados a terminaciones de todo tipo, desde la fibra de carbono al grafito, pasando por el titanio y colores imposibles como el morado o el turquesa para firmar algunas ediciones especiales.
Fuente: Aston Martin
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