¿Qué hace que un coche sea el más rápido del mundo? Probablemente ese sea el quid de la cuestión, y la pregunta a la que tengamos que responder para entender por qué Tesla ha presentado a su nuevo Tesla Model S P100D como el «coche más rápido del mundo». Para conseguirlo, era necesario una batería más potente, y con mayor capacidad energética, que llega ya hasta los 100 kWh, frente a los 60 kWh de la versión más básica, y los 90 kWh de la versión más rápida y potente comercializada hasta la fecha por Tesla. Pero sobre todo era necesario mejorar aún más su aceleración. El Tesla Model S P100D acelerará de 0 a 96 mph en 2.5 segundos, lo que lo dejaría en un 0 a 100 km/h en torno a 2.6 o 2.7 segundos. También se comercializará un Tesla Model X P100D, la versión más rápida y potente de su «crossover» eléctrico. Pero, una vez más, ¿por qué asegura Tesla que es el «coche más rápido del mundo»?
Evidentemente Tesla se ampara en su aceleración. Con estas cifras nos encontraremos muy pocos deportivos que sean capaces de acelerar de 0 a 100 km/h tan rápido como un Tesla Model S P100D. Tesla menciona a los dos únicos deportivos que superan esas cifras, el Ferrari LaFerrari y el Porsche 918 Spyder, pero los elimina de la ecuación por tratarse de superdeportivos muy exclusivos, en precios en el orden del millón de dolares, que además ya no están a la venta por haberse comercializados en tiradas muy limitadas, y estar agotados a día de hoy.
Evidentemente la aceleración no lo es todo, y utilizar ese argumento para definir a su berlina eléctrica como la más rápida del mundo es un tanto atrevido para los de Elon Musk. Pero a tenor de sus cifras estoy convencido de que estaréis conmigo en que estamos ante un coche impresionante.
El Tesla Model S P100D ofrecerá una autonomía de 613 kilómetros según el ciclo europeo. Una cifra impresionante para un coche eléctrico, e incluso para un coche de su tamaño y potencia, puesto que no es fácil encontrar berlinas de muy altas prestaciones que sean capaces de llegar a su destino a distancias tan alejadas sin parar a repostar. Salvando el hecho de que esa autonomía se basa en la teórica de la homologación, y que el rendimiento energético de este coche dependerá, en gran medida, de la conducción practicada, en el ámbito teórico prácticamente sería capaz de viajar entre Madrid y Barcelona sin parar a recargar baterías.
Su velocidad punta estará limitada a 250 km/h y su precio en Estados Unidos se situará, para ambos modelos, entre 134.500 dólares y 135.000 dólares. También es interesante mencionar que Tesla ha ofrecido, a aquellos clientes que aún estuvieran esperando la reserva de un Tesla Model S P90D con Ludicrous Mode, la posibilidad de aumentar las baterías de su reserva a 100 kWh por 10.000 dólares adicionales.
Los actuales propietarios de un Tesla Model S P90D con Ludicrous Mode, que ya tengan el coche en su garaje, también podrán acogerse a la ampliación de baterías, aunque su precio ya ascenderá a 20.000 dólares, según Tesla por el coste del montaje y el reciclado de la antigua batería.
Fuente: Tesla
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