BMW no sólo se dedicó a crear un BMW M4 aún más salvaje con el BMW M4 GTS. La versión más radical del BMW Serie 4 ha servido además como laboratorio (con alerón y jaula antivuelco) para una tecnología, el sistema de inyección de agua, que pronto veremos en más modelos y no sólo de la marca de Munich.
Bosch, encargada de su desarrollo, ya ha anunciado la expansión de este sistema:
Según habría señalado en unas declaraciones a Autocar Fabiana Piazza, al frente de los proyectos globales de Bosch, y Martin Frohnmaier, responsable en Bosch del proyecto de la inyección de agua, esta tecnología podría aplicarse a todos los segmentos y de hecho en la marca estarían trabajando para ir ya un paso más allá, ofreciéndoselo a más marcas, tras haber utilizado al BMW M4 GTS como “cliente piloto”.
Su incorporación en “masa” al mercado estaría programada para 2019, gozando de una ventajosa posición al no haber otras alternativas ofreciendo esta tecnología. Además su expansión abarataría los costes, favoreciendo así una aún mayor presencia.
Recordemos que este sistema ayuda a mejorar el rendimiento y a reducir el consumo gracias a la reducción de temperatura que supone inyectar agua en el proceso de combustión. Se había utilizado con anterioridad en competición y el BMW M4 GTS ha sido el encargado de implantarlo en las calles.