El Supermarine Spitifre cumple 80 años. Si no sabéis de qué estoy hablando, mirad a los cielos. Se trata del cazabombardero británico más famoso de todos los tiempos. El avión que formó la espina dorsal de la Royal Air Force británica en su defensa ante la maquinaria de guerra de Hitler, durante la Segunda Guerra Mundial. Un avión multiusos que combatió en todos los frentes del conflicto, y que cumple 80 años desde su puesta en servicio este mismo año. Q by Aston Martin ha querido celebrar los 80 años de este mito a su manera.
A su manera es mediante la producción de ocho Aston Martin V12 Vantage S un tanto especiales. Un coche por cada década de existencia del Spitfire, y cargados de inspiración aeronáutica. Sin ir más lejos, su carrocería ha sido pintada en un verde oscuro llamado Duxford Green – Duxford era el nombre de la base donde los Spitfire estuvieron por primera vez basados. El color amarillo de su calandra y la fina línea que recorre su carrocería es también un homenaje a la decoración de estos primigenios cazabombarderos.
La Aircraft Restoration Company de Duxford se encarga de la restauración de aviones de época, y a ella se le ha encargado la producción de varios componentes para este Aston Martin Vantage V12 S. Por ejemplo, las colas de escape, cuyo proceso productivo las ha rematado con ese característico arco iris metálico. En la instrumentación posee el característico emblema circular de la RAF, y detalles en color verde en su habitáculo. Los asientos, forrados en cuero marrón, tienen bordados dos Spitfire en los reposacabezas.
El interior ha sido forrado al completo en Alcantara, y detalles como la guantera o alfombrillas han sido cuidados hasta el extremo. El interior de las puertas es fibra de carbono. El coche se entrega en el IWM Duxford, un espectacular museo de aviación, e incluye un paseo en un auténtico Spitfire para los afortunados propietarios de este Aston Martin – que sólo se puede adquirir a través de Aston Martin Cambridge en Reino Unido. Como accesorios, una preciosa chaqueta Irvin, gafas de aviador e incluso un casco.
Aston Martin pide 180.000 libras por cada uno de estos deportivos. Son casi 40.000 libras más que un Aston Martin Vantage V12 S de serie. El RAF Benevolent Fund – una fundación benéfica de la Royal Air Force – se lleva una parte de los beneficios de la venta. A nivel mecánico, no hay diferencias con otros Aston Martin Vantage. En concreto, monta un potente V12 de 6,0 litros y 571 CV de potencia, con el que es capaz de alcanzar la friolera de 330 km/h. Casi tan rápido como un Supermarine Spitfire de verdad.
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