Mañana es el tradicional sorteo de la Lotería de Navidad, y se repartirán un total de 24,4 millones de euros en premios. La pregunta no es qué nos compraríamos con el premio, si no qué coches nos compraríamos. Estás en Diariomotor al fin y al cabo. Este año los premios son idénticos al pasado, es decir, que el ganador del Gordo se llevará 320.500 euros, previa mordida de Hacienda. Hemos elaborado una lista con los coches que pasarían a ocupar nuestro garaje si somos los dichosos vencedores de los premios de la Lotería Nacional.
Nos ha tocado el Gordo: 320.500 euros
Si me tocase el Gordo de la Lotería podría comprarme muchos superdeportivos actuales, aunque seguiría sin poder aspirar a ese Olimpo donde viven los Koenigsegg o los Bugatti. Tendría que optar por una máquina más sensata, dentro del aura irracional que tiene la compra de un superdeportivo. Aunque no lo pudiese mantener – ya os hemos hablado de lo que cuestan los superdeportivos – posiblemente optaría por un Ferrari F12 Berlinetta. Por varios motivos que a continuación os voy a exponer.
En primer lugar, mi teoría personal de que será el último Ferrari creado a la vieja usanza. Es decir, con un motor V12 atmosférico en posición delantera longitudinal. Nada de apoyos eléctricos o turbos, sólo un propulsor de 6,3 litros capaz de girar a casi 9.000 rpm y desarrollar 740 CV de furiosa potencia. Que es transmitida sólo al eje trasero, dicho sea de paso. Un coche en claro peligro de extinción, que se encuentra tan cómodo en un largo viaje por autopista como en un track-day en el circuito de Spa.
Cuesta 311.500 euros, por lo que los 9.000 euros que me sobran los puedo gastar en gasolina o en su seguro. Un plan perfecto. Es una de las opciones que barajo, aunque si por mí fuese, optaría por una pequeña colección de coches clásicos, esos cuyo valor no hace más que ascender. Una colección donde habría un ejemplar de cada generación del BMW M3, varios Porsche 911 refrigerados por aire y algún clásico americano, de esos tan políticamente incorrectos que necesitan una gasolinera como remolque.
Segundo Premio: 100.500 euros
El Segundo Premio no nos sacará de pobres, pero a los aficionados al automóvil nos hace inmensamente ricos. Ricos en experiencias que se pueden vivir al volante de fantásticos vehículos. Mi elección personal habría sido un Porsche Cayman GT4. Por «sólamente» 99.095 euros, es un coche con prestaciones superiores a un Porsche 911, un carácter mucho más radical y casi tanta potencia como su versión básica. Pero mucho me temo que no será posible: sus 2.500 unidades se han agotaron en apenas unos días.
No obstante, optaría por otro coche atípico. Un Corvette Stingray con el pack prestacional Z51 y el motor 6.2 V8 de 455 CV. Un potente atmosférico asociado a una caja de cambios manual de seis relaciones. Su precio en España era de 79.900 euros, pero Chevrolet se retira oficialmente de Europa en apenas unos días, el 31 de diciembre. No obstante, en la web alemana de Chevrolet aún aparece a la venta en Alemania. No estaría mal hacer una excursión, y aprovechando un invierno atípicamente cálido, estrenarlo en Nordschleife.
Tercer Premio: 40.500 euros
Con un presupuesto de 40.500 euros las opciones son muy variadas. Desde un gran número de GTIs de altas prestaciones a incluso algunos deportivos pequeños. Mi elección sería clara: un Nissan 370Z con acabado GT. Por 37.900 euros – 5.000€ más que la versión básica – me llevaría un deportivo con todas las letras, muy bien equipado. Un coche en peligro de extinción cuyo propulsor 3.7 V6 atmosférico es capaz de desarrollar 328 CV de potencia, transmitida al suelo mediante una caja de cambios manual de seis relaciones.
La versión Nismo del Nissan 370Z cuesta 44.900 euros, y con ella recibimos un tren de rodaje con una puesta a punto aún más radical, así como un propulsor V6 retocado, cuya potencia asciende a 344 CV a 7.400 rpm. Una estética más racing también acompaña a esta versión. Nos excedemos de los 40.500 euros de presupuesto, pero muchos podremos suplir esos 4.400 euros con nuestros ahorros, ¿verdad? Es un coche cuyo ciclo de vida está a punto de terminar, y creedme, no se volverá a repetir un coche así.
Cuarto Premio: 16.500 euros
Por 16.500 euros la oferta de coches prestacionales es más bien escasa. No obstante, por 16.380 euros es posible comprar todo un Suzuki Swift Sport. Es uno de esos coches que parece una cápsula temporal. Un utilitario deportivo de los que ya no quedan, equipado con un motor 1.6 atmosférico de 136 CV y alto régimen de giro. Una máquina cuyo peso es de sólo 1.120 kilos y está hecha para ser disfrutada en una carretera de curvas. Un coche cuya potencia no es excesiva, y que podremos exprimir a fondo en nuestra carretera favorita.
Pero por este importe, preferiría acudir al mercado de segunda mano, donde podemos encontrar máquinas muy interesantes por dicho importe. Como por ejemplo un Nissan 350Z con pocos kilómetros en muy buen estado. O un BMW M3 E36 de serie, bien mantenido. También podremos adquirir un mito del DTM de los años 80, como es el fantástico Mercedes 190 2.5-16, uno de esos coches creados por necesidades de homologación. Una máquina cuyo motor de cuatro cilindros fue desarrollado por Cosworth, un BMW M3 E30 fabricado en Stuttgart.
Quinto Premio: 5.300 euros
Con el Quinto Premio no podemos hacer demasiado en términos automovilísticos. Falso. Sigue siendo un importe de dinero considerable. Mi opción personal sería optar por uno de aquellos maravillosos GTI de los años 90, algunos como el Peugeot 106 Rallye o el Citroën ZX Volcane aún se pueden encontrar en buen estado por dicho importe, aunque será complicado encontrar alguno que no haya sido modificado de forma extensiva. Otra buena idea es usar esos 5.300 euros para calzar a tu coche varias modificaciones que mejoren sus prestaciones.
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