Porsche volverá a las mecánicas bóxer de cuatro cilindros. Este hecho es una realidad amparada por la necesidad de alcanzar nuevas cotas de eficiencia, explorando todo el potencial de la marca en tanto a herramientas para downsizing. Las futuras generaciones del Porsche Boxster y Porsche Cayman, serán las escogidas para presentar al mundo el regreso de Porsche a los motores de cuatro cilindros. Pero no nos engañemos, el rendimiento de estos nuevos motores estarán a la altura de los seis cilindros actuales, si es que no deciden sorprendernos e ir un paso más allá.
Haciéndonos eco de las últimas informaciones recogidas por CAR, será tres variantes las que veremos sobre el nuevo bóxer de cuatro cilindros. Con 1.6, 2.0 y 2.5 de cilindrada, Porsche ha desarrollado un arquitectura modular que le permita contar con un enorme espacio de maniobra y evolución. Las potencias de estos motores ocuparían un margen desde los 210 CV hasta los 360 CV.
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Un aspecto a considerar es el hecho de que la nueva generación de motores bóxer, no ofrecerá configuración alguna como motor atmosférico. Todos los diseños de cuatro cilindros emplearán sobrealimentación por turbocompresor e inyección directa de gasolina.
Sobra decir que estas nuevas mecánicas son 100% Porsche, dejando a un lado cualquier colaboración con Volkswagen-Audi en este punto. Aunque sabemos que el nuevo Porsche Macan hará suyo el motor 2.0 TSI de VAG, los nuevos bóxer de cuatro cilindros están siendo desarrollados por Porsche en exclusiva. Algo muy comprensible teniendo en cuenta que la firma de Sttutgart se juega mucho con este nuevo diseño.
No son pocos los que están valorando el desarrollo de estas nueva mecánicas como un innecesario paso atrás, pero el caso es que tras la presentación del Porsche 919 Hybrid con motor V4, la maquinaria de Porsche avanza a paso firme en esta nueva etapa de downsizing.
Solo hace falta echar la vista atrás, donde modelos como los Porsche 924 o 944, Porsche 968 CS en configuración atmosférica y turbo y el siempre legendario Porsche 356, defendían el uso de mecánicas de cuatro cilindros.
Tras la llegada a los nuevos Boxster y Cayman, el próximo gran objetivo de estos motores bóxer de cuatro cilindros será conquistar la gama del Porsche 911. La adopción de estos motores en el 911 brindaría a Porsche nuevas herramientas para configurar el acceso de gama, además de servir como punto de partida para poner en el mercado un 911 híbrido enchufable de altos vueltos.
