He tenido acceso a una oportunidad única, conocer en vivo y en directo al nuevo Ferrari F12tdf. No es una presentación más, ante mí el máximo estandarte de la Ferrari más clásica en cuanto a concepto y filosofía. Lo llamo el último gran Ferrari, y créeme que lo denomino así por motivos de mucho peso. Este nuevo superdeportivo es mucho más que un Ferrari F12 Berlinetta mejorado, pues tras su musculoso y exagerada carrocería ahora se ocultan secretos sobre el futuro de Ferrari. He aquí el último gran V12 firmado por Ferrari, lo que venga después del Ferrari F12tdf podrá ser mejor o peor, pero nunca será comparable y éste es el porqué.
La leyenda V12 termina aquí
Cada día que pasa es más evidente que los propulsores de doce cilindros tienen los días contados. Muchas marcas han ofrecido diferentes versiones y opiniones sobre como intentarán mantener en cartera a estos propulsores, pero la realidad es que estamos antes una muerte anunciada de la verdadera esencia de estos propulsores. Con el Ferrari F12tdf, la casa de Maranello cierra un círculo en torno a su tradición construyendo mecánicas de 12 cilindros. Con 780 CV, aspiración atmosférica y un techo de giro de 8.900 revoluciones por minuto, el amargo sabor de la despedida es más llevadero. Ferrari trabaja en un camino que habla abiertamente de soluciones de hibridación, sistemas mild-hybrid a 48 voltios para ser más exactos, que permitan arañar bastantes décimas a la hora de homologar consumos. Con el tiempo, la hibridación irá a más buscando un mayor protagonismo del sistema de propulsión eléctrica tal y como sucede en LaFerrari, llegando a ofrecer cifras de autonomía en modo 100% eléctrico. El motor V12 seguirá existiendo, sus prestaciones incluso se mejorarán, pero con el Ferrari F12tdf se cierra el capítulo dedicado a los puristas, a aquellos que se enamoraron del 599 GTO y hoy pueden permitirse repetir idilio con la generación F12.
El éxito de ser único además de Ferrari
La especulación que vive el mercado de los coches deportivos y, especialmente cualquier unidad que pertenezca a una serie limitada, ha convertido a cualquier Ferrari en el objeto de codicia de los mejores coleccionistas y especuladores. Últimos ejemplos como el Ferrari 458 Speciale Aperta han puesto de manifiesto que existe un problema con la especulación, pues el automóvil pierde su sentido en favor de la codicia, lo cual permite disfrutar de una muy buena imagen en bolsa, pero arruina el espíritu con el cual Ferrari ha llegado hasta nuestros días. Con 799 unidades y apenas unos días de vida, el Ferrari F12tdf ya puede presumir de tener una demanda mucho mayor a la de su oferta. Su precio se puede catalogar incluso de bajo en relación a su exclusividad, por debajo de los 400.000 €, existiendo propuestas en firme para segunda mano que superan holgadamente los 500.000 €. ¿Estamos ante una burbuja? Lamentablemente este tipo de bienes se están empleando como un valor refugio, por lo que Ferrari está fabricando expositores rodantes que se mantendrán ocultos para mejorar su reventa. Aún así no nos engañemos, algún día las aguas volverán a su cauce y puede que Ferrari se vea obligada a tomar cartas en el asunto.
Cuatro ruedas directrices, no hay paso atrás
Con 780 CV sobre el tren trasero, y más importante, con 705 Nm de par a 6.750 rpm con un 80% disponible desde las 2.500 rpm, parece una locura que hablemos de un tracción trasera con motor delantero-central. Pero el F12 es una Berlinetta y como tal debe mantener intacta su esencia. Las nuevas exigencias del guión han obligado a rediseñar el tren delantero, aumentando el ancho de vía hasta los 1.673mm e instalando neumáticos más anchos (275mm en lugar de 255mm), lo cual contribuyó a perder agilidad en favor de un agarre y estabilidad superiores. La variación de las geometrías tiene su límite cuando hablamos de velocidades por encima de los 340 Km/h y cierto compromiso para el uso mixto carretera/circuito. Por ello, Ferrari se ha arriesgado con el uso de un tren trasero direccional cuya misión es paliar la tendencia rebelde y sobrevidora que ha estrenado el tren delantero. Su denominación, Virtual Short Wheelbase, consigue controlar la incisiva nueva delantera para mantener la trayectoria estable a altas velocidades. Así, la aceleración lateral pasa a 1,43g en el F12tdf por los 1,25g del F12 Berlinetta.
El uso de ejes direccionales no es sólo una moda fruto del marketing, sino que su aplicación aporta ventajas reales en el plano dinámico, tanto en agilidad a bajas velocidades como en estabilidad a alta velocidad. Ferrari es consciente de ello, y gracias al beneficio que aporta en prestaciones y confort, ha decidido que el nuevo tren trasero direccional haga su debut en el Ferrari F12tdf para llegar a otros modelos de la marca con cada nuevo lanzamiento. El F12tdf es sólo el primero y la lista de asistencias a la conducción no hará más que crecer y crecer.
El punto de partida del programa One-off
Uno de los grandes negocios de Ferrari ya no es la fabricación de coches de producción, sino crear automóviles a medida para sus clientes más pudientes. Más allá de las ediciones especiales y las series limitadas, existe un nicho de mercado que busca el súmmum de la exclusividad a partir de un coche único del que se fabricará una única unidad, o un número determinado de unidades, pero para un único dueño con el compromiso de jamás replicar su diseño y características. Ferrari ha creado un departamento capaz de crear un coche a medida partiendo de los bocetos y exigencias de su cliente. Bajo esta premisa, en los últimos meses hemos podido conocer el Ferrari F12 TRS y el Ferrari F12 SP América, dos coches únicos cuyos precios superan holgadamente los 2 Millones de euros. No nos engañemos, éste es el nuevo y más interesante negocio para Ferrari.
La demanda de series muy limitadas como el Ferrari F60 América o los dos One-off citados no hace más que subir con mercados como Asia creciendo a un ritmo vertiginoso. Durante el próximo año 2016 se descubrirán nuevos modelos desarrollados bajo este exclusivo departamento de Ferrari, y la nueva base técnica del Ferrari F12tdf será el punto de partida de alguno de estos nuevos coches únicos. Ferrari, además, aprovecha estos encargos personalizados para probar e implementar nuevas soluciones creativas o técnicas, lo cual puede comprobarse comparando el nuevo Ferrari F12tdf frente a las últimas creaciones desarrolladas a partir del Ferrari F12 Berlinetta.
El futuro tras el F12tdf
Tras la salida a bolsa de Ferrari, los movimientos del fabricante italiano están obligados a estudiarse al detalle. El límite de producción de 7.000 unidades al año se mantendrá hasta nuevo aviso, pero con la entrada en escena de Sergio Marchionne como relevo de Luca Cordero di Montezemolo, todo apunta hacia una revisión de este objetivo para alcanzar las 9.000 o 10.000 unidades al año a largo plazo. A día de hoy Ferrari no tiene ansias por crecer en volumen, y es que su mayor volumen de negocio está en la exclusividad y la personalización, por lo que fabricar un coche de acceso no es una prioridad mientras sus clientes demanden más series limitadas.
El punto de inflexión que hemos visto en el binomio California T y 488 GTB se repetirá en los F12 Berlinetta y FF. El futuro inmediato de Ferrari es apostar por ofrecer lo último en tecnología de conducción, ya sea para clientes que buscan el mejor rendimiento (Ferrari 488 GTB y sucesor Ferrari F12 Berlinetta), o para aquellos que buscan prestaciones sin abandonar el confort (California T y sucesor Ferrari FF). Motores V8 Turboalimentados y V12 híbridos compondrán toda la gama Ferrari en los próximo años, descartando cualquier suerte de «baby» Ferrari asociado a un motor V6. El Ferrari F12tdf nace como clásico, una condición que también defendió el Ferrari 458 Speciale. Una vez se entreguen todos los F12tdf fabricados se cerrará una etapa en Ferrari, una fase que ha llevado la evolución por bandera hasta conseguir el estado del arte de la técnica y la tecnología en base a los conceptos más puristas.