Ríos de tinta y verdaderas pasiones es lo que está levantando la berlina más prestacional nunca jamás creada por Infiniti. La firma premium hermanada con Nissan busca su hueco en el Olimpo de las grandes firmas automovilísticas, y para ello está dispuesta a asaltar el polvorín que esconde Nissan en su cuarte general para dar vida a una criatura con carácter… mucho carácter.
El Infiniti Q50 Eau Rouge llegará a producción, llamadme visionario o arriesgado en mi composición, pero Infiniti puede y debe construir esta berlina de marcado carácter para demostrar que no se andan con faroles cuando se trata de enfrentarse a lo mejor del segmento. Competir con Mercedes AMG, BMW M o Audi quattro Gmbh no es tarea fácil, pero en Infiniti han hecho los deberes para librar una batalla épica que sólo hable de victoria del lado nipón.
El golpe definitivo a la hegemonía alemana
No es nada nuevo ver que el trío de marcas alemanas cuenta con un merecido caché y reputación en lo que a berlinas se refiere desde hace bastante tiempo. Son muchas las firmas automovilísticas que han planeado y efectuado un asalto al poder con mayor o menor éxito, pero el trío de ases apenas sufre desperfectos en cada nueva batalla superándose con cada nueva creación que ponen en el mercado.
Marcas como Jaguar, Volvo, Lexus, Alfa Romeo o Cadillac se acercan al objetivo con cada nueva generación, pero el Infiniti Q50 Eau Rouge ha querido romper moldes apostando por un formato muy ambicioso donde técnica, tecnología y diseño sean capaces de convencer no sólo en el asfalto común, sino en el más exigente de los circuitos. Hacer de la famosa curva del circuito de Spa Francorchamps tu nombre es una contundente declaración de intenciones.
Los nuevos BMW M3, Mercedes C 63 AMG y Audi RS4 recurrirán al downszing sin por ello disminuir su potencia máxima. Con una horquilla de potencias de entre 400 y 500 CV, Infiniti decidió apostar fuerte y echar mano de todo lo conocido y desarrollado en honor al Nissan GT-R. ¿Veremos entonces una simple adaptación del Nissan GT-R a la carrocería del Infiniti Q50? Nada más lejos de la realidad, pues Infiniti dice haber conseguido lo mejor de ambos conceptos para hablar de una berlina de altas prestaciones sin necesidad de renunciar a nada.
De este modo el Infiniti Q50 Eau Rouge acogerá en su seno un propulsor V6 de 3,8 litros y doblemente sobrealimentado por turbocompresor con capacidad suficiente para arrojar 568 CV de potencia máxima y 600 Nm de par. La tracción total a las cuatro ruedas tendrá un reparto 50/50, mientras que la transmisión de doble embrague promete sensaciones muy cercanas a las que exhala cada toma de aire que esculpe la silueta del GT-R.
Carácter GT-R
Pese a que Sebastian Vettel no es el más querido de cuantos pilotos discurren por la parrilla de Fórmula 1, su experiencia y manos han servido a Infiniti para poner a punto cada detalle del Infiniti Q50 Eau Rouge. Una velocidad máxima de 290 Km/h y un tiempo de 4 segundos para ejecutar el 0-100 Km/h serán sólo algunos de los detalles que luzca su ficha técnica.
La confirmación oficial sobre la llegada al mercado de esta berlina prestacional se está haciendo esperar, aunque desde Infiniti no dudan en hablar sobre la gran acogida que esta viviendo esta apuesta en cada evento o salón del automóvil al que acude. De su producción sólo se conoce que será en edición limitada y con mínimos cambios sobre lo ya conocido.
El Q50 Eau Rouge no será un superventas, y de hecho su precio no será bajo, sin embargo sus genes hablan de Nürburgring como una segunda casa y de firmas consagradas como objetivos ya cumplidos bajo la piel del Nissan GT-R.
Equivocada o no, Infiniti tiene entre manos una de esas cartas que puede hacer más por su imagen que muchos nuevos modelos lanzados al mercado en el futuro próximo. Diseño y técnica lucen en el Infiniti Q50 Eau Rouge una perfecta composición que no hacen sino plantearse el porqué Infiniti todavía no ha dado luz verde a esta berlina todavía identificada con la coletilla “concept”.
El futuro de Infiniti en mercados como el europeo pasa por aumentar su número de ventas aprovechando las sinergias con Mercedes-Benz, pero crecer en imagen es otro cantar y sin duda no se presenta como una tarea fácil. Tras cancelar proyectos como el ambicioso e interesante Infiniti Emerg-E sobre base Lotus, la apuesta por un modelo halo como el Infiniti Q50 Eau Rouge no se puede definir de otro modo que obligada si Infiniti quiere convertirse en una alternativa real en los mercados de Europa y EE.UU.
