Hace 30 años Peugeot daba vida a uno de los utilitarios deportivos que más han calado entre los aficionados al motor y nos presentaban a un Peugeot 205 GTI que hoy sirve de “excusa” para dar vida a un Peugeot 208 GTI 30th más que dispuesto a reconquistar a todos aquellos que en su día dijimos que el Peugeot 208 GTI pecaba de ser excesivamente correcto en sus formas. Nos hemos ido hasta el circuito del Jarama y nos hemos puesto ya tras el volante de este nuevo Peugeot 208 GTI 30th, ¿el resultado? Un nuevo Diariomotor Altas Prestaciones protagonizado por un 208 GTI que ahora cuenta con esa vocación deportiva que tan en falta echábamos, ¿habrá conseguido superar al Ford Fiesta ST?¿al Renault Clio RS? Hora de comprobarlo.
Medio día en el circuito del Jarama. Las previsiones de nieve de los días anteriores nos han dado un respiro, luce el sol, la pista esta seca y a pie de pit lane nos espera el Peugeot 208 GTI 30th acompañado a escasos metros por un Peugeot RCZ R que ya me dejo muy claro hace un año como se las gastan actualmente en Peugeot Sport, dejando claro que saben realmente bien como poner a punto un chasis. Mis esperanzas están puestas en aquellas buenas sensaciones que me dejó el RCZ R y que espero que se repitan en el 208, al menos, sobre el papel, no podía pintar mejor.
Conociendo al Peugeot 208 GTI 30 aniversario
Pequeños, muy pequeños, cambios estéticos definen a esta edición 30 aniversario, aunque dicho sea de paso, le sientan realmente bien. Estos cambios estéticos pasan por una serie de nuevos apliques con un acabado en negro mate que sustituyen a los cromados del GTI “normal” y que conjugan a la perfección con un juego de llantas de 18 pulgadas específicas, también acabadas en negro mate, tras las que asoman unas pinzas de freno rojas.
Completan los cambios una insignia en el pilar posterior, recordándonos que estamos ante una edición especial, además de por supuesto los cambios antes ya conocidos en el Peugeot 208 GTI original, como la parrilla o el alerón. Pero todavía hay un detalle más.
En su zaga aparece una nueva salida de escape doble que sustituye a la original para pasar a lucir un acabado redondeado.
Miro al fondo de la fila de Peugeot 208 GTI 30th y no, no hay ninguna unidad con el característico acabado bicolor con el que debutó públicamente esta versión. En su lugar nos encontramos con los otros dos colores disponibles para esta versión: rojo y un blanco perlado.
En cifras, el Peugeot 208 GTI 30th cuenta con una longitud de 3.962 mm, una anchura de 1.739 mm (sin retrovisores, con ellos desplegados la anchura es de 2.004 mm) y una altura de 1.450 mm, siendo su batalla de 2.538 mm y su peso, en vacío, de 1.185 kg.
Estos tímidos cambios estéticos de su exterior dejan paso a un habitáculo donde se introduce una nueva pareja de asientos tipo baquet que, acabados en alcántara y aderezados con costuras en rojo nos muestran un formidable compromiso entre comodidad y agarre, sin unas “orejas” inferiores excesivas que dificulten la operación de entrada y salida y con un buen mullido.
A nuestro alrededor todo un despliegue de costuras en rojo. El volante, el salpicadero, los guarnecidos de las puertas… y a nuestros pies un detalle que, lo reconozco, me gusta bastante: unas alfombrillas rojas que no, no son precisamente prácticas por eso de la manchas, pero son todo un guiño a la moqueta roja original del Peugeot 205 GTI.
Sí, se mantiene el polémico volante. Pequeño, muy pequeño si lo comparamos con cualquier otro volante moderno, ha habido bastantes quejas por la dificultad para ver algunos detalles del cuadro con este volante, pero en mi caso se adapta bastante bien y aunque es cierto que la parte superior del aro del volante queda demasiado cerca de la pantalla central, me gusta las sensaciones que deja una vez lo estamos usando. También sigue presente la característica pantalla táctil coronando el salpicadero.
Como detalle adicional, si levantamos la cabeza, nos encontramos en la parte central delantera una placa con el número de nuestra unidad y es que recordemos que esta edición especial esta limitada a 500 unidades.
Bajo su capó, el viejo conocido 1.6 THP reinterpretado por Peugeot Sport
Levantamos el capó y un “THP 208” nos recibe sobre el bloque del motor, con un bonito acabado, advirtiéndonos de paso que para esta versión Peugeot Sport también ha introducido cambios en el viejo conocido 1.6 THP, motor que el año pasado volvió a ganar, por octava vez consecutiva, el premio a motor del año.
Para la ocasión nos cuentan desde Peugeot que cuenta con un sistema de inyección directa revisado, un nuevo árbol de levas y un nuevo sistema de escape y una también renovada gestión electrónica.
Estos cambios se traducen en un aumento de potencia de 8 caballos y un incremento de par de 25 Nm, quedándonos con un total de 208 caballos a 5.800 rpm y un par máximo de 300 Nm disponible desde las 1.700 rpm.
Prestacionalmente registra un 0 a 100 km/h de 6.5 segundos, con una recuperación en el 80-120 km/h de 7.6 segundos (6 segundos si lo hacemos en 5ª) y una velocidad máxima de 230 km/h.
Pero lo más interesante del Peugeot 208 GTI 30th no es ni su estética, ni los nuevos detalles de su habitáculo o la evolución del 1.6 THP, lo mejor llega de la mano de su parte ciclo.
Demostrando, de nuevo, como poner a punto un chasis
Como decía líneas más arriba el Peugeot RCZ R me demostró hace un año la buena capacidad de Peugeot Sport para conseguir una excelente puesta a punto. Sí, podemos reprocharle al RCZ R un interior ya algo anticuado, también nos gustaría que fuera tracción trasera o total, pero desde luego una vez nos sentamos tras su volante y empezamos a enlazar curvas se nos olvida todo y sólo nos quedan elogios para su puesta a punto. Ahora esa capacidad se ha aplicado al 208 y el resultado es de nuevo encomiable.
Esta puesta a punto por parte de Peugeot Sport pasa por un nuevo reglaje para la suspensión con un nuevo tarado para el amortiguador y nuevas cotas para el muelle, reduciendo de paso su altura en 10 mm. La convergencia y caída también se ha revisado, se ha retrasado la barra estabilizadora delantera y se ha aumentado la anchura de sus vías, tanto la delantera como la trasera, encontrándonos con un tren delantero 22 mm mayor y un tren posterior 16 mm más grande.
Además Brembo firma una nueva dotación de frenos en el eje delantero y Michelin se encarga de calzar las nuevas llantas de 18 pulgadas con unos Michelin Pilot Super Sport, pero la estrella de esta nueva puesta a punto llega de la mano del nuevo diferencial Torsen.
Ahora bien, repasada la teoría y hechas las presentaciones es el momento de ponernos tras su volante, ¿qué tal le habrán sentado los cambios a este vitaminado Peugeot 208 GTI?
Hora de entrar a pista con el Peugeot 208 GTI 30th
Ajustamos el asiento, buscamos la posición del volante, nos abrochamos el cinturón y el casco y enfilamos el pit lane…
Sobre el papel el aumento de potencia de esta versión no parece demasiado elevado, “sólo” 8 caballos, pero desde los primeros compases el 208 GTI se muestra ahora más vivo, más enérgico y sobre todo con más carácter, con más personalidad. Acelera con presteza desde abajo, demostrándonos muy buenas aptitudes desde los primeros pasos de su tacómetro y una gran capacidad de respuesta, pero lo mejor esta por llegar.
Clavamos frenos y los Brembo cumplen a la perfección. Es sin duda uno de los puntos donde siento que más a mejorado el 208 GTI, aunque bien es cierto que ya ha pasado bastante tiempo desde la última vez que me monté en la versión normal en la comparativa de pequeños GTI que preparamos tiempo atrás.
Su dirección ofrece un buen tarado y me gustan las pequeñas cotas del volante, mientras que el guiado de su cambio de 6 velocidades y su dureza es correcto, ahora bien, donde más destaca el Peugeot 208 GTI 30th es al llegar a las curvas, dejándonos con un excelente paso por curva en el que el subviraje desaparece para dejarnos con unas primeras tornas aparentemente bastante neutras, con una buena capacidad de tracción, permitiéndonos acelerar bastante pronto, para seguidamente y si así se lo pedimos, dejarnos con la posibilidad de descolocar el eje posterior para redondear la curva, todo ello ligado a una suspensión que en ningún momento se muestra excesivamente dura o radical, al contrario, es firme sí y no aparece ningún tipo de balanceo ni cabecea el coche en frenada, pero al mismo tiempo no parece nada incómoda para afrontar un tramo bacheado.
Me quedo con ganas de probarlo fuera del circuito para ver con mayor claridad como trabajan sus suspensiones ante un firme roto, adoquines, badenes y demás habituales de nuestras calles, pero la sensación al subir por algún piano es que no se percibe, para nada, un tarado radical.
Últimos metros para refrigerar y entramos a boxes. Hora de sacar conclusiones.
¿Es el Peugeot 208 GTI 30th el GTI que deberíamos haber conocido desde el principio?
Mientras me desabrocho el casco pienso en que este era el pequeño deportivo que me hubiera gustado conocer la primera vez que me monté en el 208 GTI, de hecho, quitando el precio de la ecuación y de que se trata de una edición limitada es para mí ahora el mejor GTI. Teniendo presente el precio el Volkswagen Polo GTI, de 22.850 euros, nos sigue ofreciendo la combinación más equilibrada mientras que el Ford Fiesta ST se posiciona como la alternativa más económica con un precio de 19.900 euros y al mismo tiempo con una excelente dinámica, lástima de acabado interior. El Renault Clio RS en cambio me deja con una sensación un tanto fría. Sí, es divertido, tiene una muy buena dinámica, pero su interior no me gusta nada y su precio, de 25.425 euros, no juega a su favor, además del hecho de que sólo se encuentra disponible con cambio de doble embrague.
Hablo sobre ello con el equipo de Peugeot, pregunto por qué no fue este el Peugeot 208 GTI original y me señalan a que con el Peugeot 208 GTI querían conseguir un coche que aún siendo potente y de cierto enfoque deportivo fuera totalmente apto para el uso diario, que tuviera la capacidad para ser un coche único, cómodo, confortable, práctico y al mismo tiempo permitirnos ciertas alegrías. Bien, desde luego lo consiguieron, pero tampoco veo que esta edición 30 aniversario no pueda cumplir con el cometido de ser un “coche de diario”.
Su suspensión aparentemente no es demasiado dura, sus baquets no son incómodos, su dirección tiene un buen tarado, su motor es bastante elástico, esta bien insonorizado, cuenta con un muy buen acabado…
A pesar de que echemos de menos una vocación más deportiva en la versión “normal” del 208 GTI esta funcionando bien a nivel comercial, habiéndose vendido durante su primer año de vida un total de 10.000 unidades, superando actualmente las 12.000 unidades.
Esta edición especial, el Peugeot 208 GTI 30th, se comercializará limitado a 500 unidades, de las cuales llegarán sólo 15 a España… y sí, tal y como te contábamos hace unos días ya están asignadas, aunque desde Peugeot España nos señalaron que, como es lógico, si hay demanda en España podrían llegar a desviarse unidades no comercializadas de otros países. Recordemos, que el precio del Peugeot 208 GTI 30th, sin descuentos, es de 26.930 euros.
Toca despedirnos ya del Peugeot 208 GTI 30th. Me ha dejado muy buenas impresiones, la pena es que estamos ante un coche del que sólo veremos 15 unidades en España mientras que la alternativa popular, el GTI “normal”, sigue teniendo un temperamento demasiado comedido, más aún después de haber visto de lo que es capaz tras pasar por Peugeot Sport. Dos claves: por un lado su paso por curva, con un excelente trabajo por parte del diferencial, una buena tracción, una buena dosis de diversión y por otro la buena capacidad de frenado.
Espero volver a verme las caras de nuevo con este 208… y sobre todo espero también que Peugeot se decida a sacar esta configuración de la parte ciclo en una versión no limitada, un Peugeot 208 R quizá…