Rolls-Royce Phantom Drophead Coupe Waterspeed Collection, una extensa denominación que hace gala de una de las más altas cotas de exclusividad puestas en el mercado por Rolls-Royce. Limitada a tan sólo 35 unidades, la edición Waterspeed Collection tiene su razón de ser en las hazañas de la firma británica fuera de las carreteras, concretamente en el récord de velocidad de 208 Km/h conseguido por Malcolm Campbell en el año 1937 a los mandos de un hidroplano propulsado por un motor Rolls-Royce.
Sir Malcolm Campbell (11 Marzo 1885 – 31 Diciembre 1948) fue un reconocido piloto y periodista de la época que consiguió hacerse con diversos récords de velocidad tanto sobre tierra, cómo sobre el mar. De las hazañas conseguidas, el récord de velocidad sobre agua firmado el 1 de Septiembre de 1939 con el Blue Bird K4 con motor Rolls es sin duda uno de los más recordados.
Aunque las ediciones especiales sobre el Rolls-Royce Phantom cuentan ya en su haber con importante número, todo apunta a que esta nueva edición Waterspeed Collection sobre la carrocería descapotable del Phantom podría convertirse en una de las más cotizadas por el empeño que ha puesto Rolls en convertir a esta serie en única.
Tras el Rolls-Royce Phantom Coupé Chicane dedicado en exclusiva al mercado dubaití, y donde Rolls nos mostraba una visión de deportividad muy poco habitual en la marca con hasta 600 CV y una amplia variedad de modificaciones buscando el carácter más prestacional, la edición Waterspeed Collection se convierte en la antítesis de la deportividad extrema para hacer del lujo y la sofisticación los máximos referentes.
Únicamente 35 unidades que llegarán al mercado a un precio de partida de 534.000 €. Su presentación oficial será realizada durante el próximo Concorso D’Elegenza at Villa D’Este a la orilla del lago Como en Italia.
Como no podía ser de otra forma, el Rolls-Royce Phantom Drophead Coupe Waterspeed Collection exhibe el capó de acero cepillado como muestra inequívoca de la casa. Esta pieza requiere de dos procesos de fabricación totalmente artesanal con 70 horas de conformación en una primera fase, seguidas de más de 10 horas de cepillado a mano por un especialista de la marca para conferir el aspecto final.
En el exterior, la tonalidad cromática escogida no podía ser otra que la “Maggiore Blue” inspirada en los colores que dieron vida a los hidroplanos que consiguieron los diferentes récords de velocidad. La cintura mantiene a su vez otra seña de identidad de la casa como lo es el perfil dibujado a mano a lo largo de toda la carrocería. Esta línea trazada a mano sólo puede ser realizada por una única persona cuyo cometido en la fábrica de Goodwood se ciñe en exclusiva a que ese perfil sea exacto en cada Phantom fabricado.
En el interior, aunque el tapizado en piel inunda cada detalle del habitáculo, Rolls-Royce ha decidido dotar de un punto aún más especial a esta edición escogiendo una combinación de pieles presentes en tres colores diferentes. Las inserciones en el interior estrenan una nueva terminación denominada “Abachi Wood”. Sólo la confección artesanal del resposabrazos necesita de 8 horas.
En el apartado mecánico es donde esta edición Waterspeed Collection ofrece menos diferencias, y es que Rolls-Royce mantiene la configuración técnica original con la mecánica 6,75 V12 alcanzando una potencia de 460 CV y 720 Nm de par.