Normalmente no somos de «hacer sangre» con vídeos en los que un carísimo coche se estrella. Como amante de los coches es un vídeo doloroso, y que se salda con un coche histórico en mal estado. No obstante, hay más historia que un simple accidente en pista. Sucedió este pasado fin de semana en el circuito de Spa-Francorchamps, durante un trackday. Todo se torció cuando al acelerar, en línea recta, la zaga del coche se descompuso, provocó un sobreviraje y el coche acabó estrellado contra las protecciones de la pista, destrozando todo su frontal de forma aparatosa.
El Porsche 962 C es una máquina de motor central, y a pesar del daño aparatoso sostenido en su frontal – las dos ruedas fueron arrancadas de cuajo – estoy seguro que sus daños son reparables. La chicha de la historia está en que el propietario y conductor del coche ha amenazado al canal de YouTube Auto Addiction con acciones legales si no elimina el vídeo de la plataforma online. El canal no lo va a hacer, ya que está grabado desde zonas de acceso público y cualquier dato identificativo del conductor ha sido difuminado.
En conversaciones con The Drive, el youtuber admite que fue incluso agredido por el conductor, cuando iba a interesarse por su estado tras el accidente, no obstante, no tiene pruebas de esta agresión. Lo único que sabemos a ciencia cierta es que estos coches son de conducción delicada, con mucho turbo lag y una enorme potencia, que unida a unos neumáticos fríos, un firme húmedo o unas manos inexpertas o no acostumbradas al coche en cuestión – no es sencillo conducir un coche clásico de competición – son el cóctel ideal del desastre.