Obviemos el hecho de que su nombre apele al propio dios del fuego, los volcanes, el creador de las armas de la mitología romana. La originalidad en la industria del automóvil se ha acabado. Y si nos dijeran que tendrá unas suspensiones ligeramente altas, que será para gente joven y dinámica, con afición por los deportes y las escapadas en su tiempo libre, tampoco nos extrañaría. Pero no es así. Parece que su nombre hará justicia con lo que quiere demostrarnos este coche. Se llamará Aston Martin Vulcan, se presentará muy pronto y suena como una fiera herida, como un auténtico deportivo de carreras. Vulcano ha salido de su fragua para golpear nuestros tímpanos. ¿Quieres escucharlo?
Creo que Aston Martin ha dado en el clavo. No nos ha enseñado una sola imagen, ni un trocito de aleta, ni un trocito de faro, técnicas para crear expectación que funcionan en la era de las redes sociales. Ha bastado con que nos muestren un enigmático vídeo, sombras en blanco y negro entre las que se intuye lo que podríamos interpretar como los pianos de un circuito, desplazándose a toda velocidad, para que estemos preguntándonos qué será esta sorpresa, Sombras que bien podrían ser un Test de Rorschach. Ha bastado con eso para que estemos elucubrando qué pasa por la mente de los ingenieros de Aston Martin en estos días.
Lo que no hace falta que os digamos es que este deportivo sonará a gloria. Los Aston Martin, en general, ya suenan a gloria. Eso por descontado. Pero este suena demasiado bestia como para creer que de verdad ese sonido se corresponda con el de un deportivo de calle. ¿No crees? ¿Habrán creado un superdeportivo de altos vuelos? ¿Una bestia solo para circuito?
El 3 de marzo saldremos de dudas. Mientras tanto, ¿tú qué crees que va a presentarnos Aston Martin?
Fuente: Aston Martin
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