Cuando los preparadores Mansory y MTM unen fuerzas lo lógico es preguntarse cuál será el resultado de ese trabajo conjunto. O mejor dicho: cómo de descomunal será. Para responder a esa duda sólo hay que echar un vistazo a las imágenes y al vídeo que acompañan a estas líneas: así se ha concebido el Audi RS6 Avant más brutal. El mismo que nos lleva a preguntarnos: ¿por qué alguien podría necesitar un superdeportivo teniendo esto?
Antes de analizar las modificaciones de Mansory y MTM, conviene recordar cuál es nuestro punto de partida: el Audi RS6 Avant. O lo que es lo mismo: el modelo más potente de la gama del Audi A6. Un coche que ya tiene un punto agresivo que, con estos cambios, destaca (todavía) más. El resultado salta a la vista.
Los retoques estéticos de Mansory y MTM
Comenzamos, ahora sí, por la nueva estética del Audi RS6 Avant: su carrocería se tiñe de negro brillante, un tono que combinan con las franjas azules que decoran y recorren el lateral. Es el mismo color que han elegido para darle un toque a las llantas de aleación, las pinzas de los frenos o el borde del difusor trasero. Los anillos de Audi, eso sí, pasan algo más desapercibidos al estar oscurecidos.
El kit elegido para la carrocería del Audi RS6 Avant llega de la mano de un gran paragolpes delantero en el que nos encontramos con unos nuevos spoilers de fibra de carbono que no sólo aumentan el voladizo, también la longitud del familiar alemán. En el capó, firmado por Mansory, se abren unas ranuras para facilitar la refrigeración del motor.
De camino a la zaga nos cruzamos con unos faldones laterales de nuevo cuño y con esas llantas de las que os hablábamos antes y que tienen una medida de 22 pulgadas. En la parte trasera la atención se reparte entre los nuevos spoilers (uno sobre el portón con el que aumenta la carga aerodinámica y otro por debajo de la luna) y la defensa que alberga un enorme difusor y cuatro escapes integrados en unas molduras cuadradas.
La guinda del pastel
Mansory y MTM no revelan los cambios que han aplicado en el interior del Audi RS6 Avant, pero esa falta de detalles pasa completamente desapercibida cuando revelan su trabajo en el ‘core’ del familiar. El V8 biturbo de 4.0 litros se despide de sus cifras habituales para dar la bienvenida a unas mucho más poderosas: gracias al software ‘Stage 2’ de MTM entrega 820 CV y 1.167 Nm. Unos números con los que es capaz de hacer los 0-100 km/h en 2,9 segundos y alcanzar una velocidad punta de 330 km/h.