¿Quién dijo que el lujo, la distinción, y el confort, eran las únicas características deseables en un Bentley? Desde hace años Bentley ha apostado por las prestaciones y la deportividad, incluso cuando eso conllevara abandonar ese lujo y ese confort que todos esperamos de un Bentley. Hasta el punto de tomar como base un Bentley Continental GT, eliminar sus plazas traseras y aligerar todo lo que fuera posible para crear un auténtico deportivo de circuito, el Bentley Continental GT3-R, 100 kilogramos más ligero, y con un motor V8 twin-turbo de 580 CV de potencia. Pero eso no es suficiente. Bentley aspiraba a algo más. Razón por la cual el viernes conoceremos al más extremo de sus productos.
De momento es difícil saber de qué se trata. Todo lo que podemos contaros es lo que hemos visto en un primer vídeo, a modo de adelanto, en el que nos muestran unas llantas – que por cierto, si no son las mismas, guardan cierto parecido con las del Bentley Continental GT3-R – con unas inmensas «paelleras» a modo de discos de freno. También vemos un generoso alerón de fibra de carbono, de nuevo muy parecido al del GT3-R, y unas tomas de ventilación como las que se aprecian en el capó de ese mismo deportivo.
Dicho lo cual, si tuviéramos que apostar nuestro dinero lo haríamos jugándonosla a que estamos ante una versión aún más potente y radical del Bentley Continental GT3-R.
Recordemos que el Bentley Continental GT3-R era, por otro lado, un deportivo radical y enfocado en los circuitos que, como no podía ser menos, había nacido de las aspiraciones de la marca en la competición y de su Bentley Continental GT3 de carreras. A priori, no parecía que un Bentley Continental GT fuera una base adecuada para un deportivo de carreras, pero los de Crewe lo consiguieron, y con sus primeras victorias decidieron lanzar un deportivo de calle inspirado en su GT3 que llegaría limitado a tan solo 300 unidades.
Ahora solo queda esperar hasta el viernes para saber qué sorpresa nos ha reservado Bentley. Imaginamos que de tratarse de una nueva iteración del Bentley Continental GT3-R estaremos ante una máquina más potente, que supere los 580 CV de potencia de su predecesor, y más ligera, que baje aún más de 100 kilogramos, por debajo de los 2.195 kilogramos que alcanzaron con aquel deportivo.
Fuente: Bentley
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