Hay coches que están hechos para llevarnos de un punto a otro sin más, otros están concebidos para hacernos los viajes más cómodos y algunos para dispararnos las pulsaciones en las carreteras más divertidas. Independientemente de su fin, son máquinas hechas para ser usadas y no para pasar sus días en un garaje. Por eso, es una maravilla encontrarse con modelos que presumen de elevados kilometrajes… y luego está este BMW M5 que ha recorrido más de 870.000 kilómetros (542.500 millas).
Esta magnífica sorpresa ha sido encontrada por el canal de YouTube E39Source. El protagonista de uno de sus últimos vídeos es un BMW M5 E39 (2002) de color gris. Lo cierto es que, a primera vista, se parece a cualquier otra berlina deportiva firmada por la marca bávara: tanto la estética exterior como la interior están en buen estado. A nadie se le escapa la ausencia del capó, que se debe a una revisión.
Con la configuración de fábrica
El verdadero secreto de este BMW M5 reside en ese motor que se muestra sin tapujos: ha recorrido 873.069 kilómetros, la cifra que marca el odómetro del vehículo. Según su propietario, nunca han tocado el motor: todo está como cuando salió de la fábrica… hace veinte años.
El dueño asegura, además, que las guías de la cadena de distribución son las originales: algo que llama la atención de E39Source porque este componente del motor S62 bávaro fallaban. Si la afirmación es real, este BMW M5 ha superado la prueba del paso del tiempo y de los kilómetros. Podríamos estar hablando del ejemplar con mayor kilometraje que existe.
Este BMW M5 y su flamante propietario viven en Texas (Estados Unidos), pero en el vídeo no desvela la razón por la que su berlina deportiva ha acumulado semejante kilometraje. Podemos apostar a que el dueño tiene que conducir largas distancias para ir al trabajo o lleva a cabo largos trayectos para ver a su familia. Y también podemos pensar que, sencillamente, le encanta conducir su M5 porque disfruta y se divierte al volante. ¿Qué creéis vosotros? Yo me quedo con esta última opción.