El Bugatti EB110 GT es uno de mis superdeportivos favoritos. Sin cuestión. Hace unos años escribí un reportaje sobre el EB110, y por qué es uno de los superdeportivos más injustamente infravalorados de todos los tiempos. De hecho, no mucha gente sabe que fue el primer coche de calle en tener un monocasco de fibra de carbono, adelantando en varios años al McLaren F1. Uno de los elementos de mayor personalidad del Bugatti EB110 fue su propulsor, un compactísimo V12 de 3,5 litros, sobrealimentado mediante nada menos que cuatro turbocompresores.
A principios de los años noventa, aquel motor de baja cilindrada ya era capaz de desarrollar 561 CV, y lo hacía a 8.000 rpm. Asociado a un sistema de tracción total permanente, lograba hacer el 0 a 100 km/h en solo 3,5 segundos, firmando una velocidad punta de 342 km/h. La historia de la Bugatti de Romano Artioli quedó truncada por la crisis económica de mediados de los noventa, y la llegada del superlativo McLaren F1 en 1994. No obstante, en nuestro corazón siempre hay hueco para el EB110. Si no me creéis, tenéis que ver el vídeo que os dejamos a continuación.
El motor de 3,5 litros comienza suavemente a subir de régimen de giro, y la sinfonía pausada se convierte en una orquesta a pleno pulmón cuando el motor supera las 6.000 rpm. El corte de inyección llega de forma estruendosa y brusca a casi 9.000 rpm. El vídeo incluye diversas lanzadas en banco de potencia, así como aceleraciones del vehículo bajo carga, circulando por un polígono industrial italiano – cual fanáticos del tuning. Sube el volumen, escucha como sus cuatro turbos IHI soplan a pleno pulmón, y deléitate con sus válvulas de descarga.
No te olvidarás fácilmente de este vídeo.
Fotos del Bugatti EB110