Con el permiso del Bugatti Chiron que Bugatti usó para filmar el vídeo de la velocidad punta de otro Chiron en Ehra-Leissen. Con todo, este Lamborghini Huracán presume de un sistema mucho más profesional enfocado a grabaciones cinematográficas comerciales. De hecho, el conjunto de brazo estabilizado – conocido en el negocio como «gimbal» – y cámara de cine profesional tiene un coste estimado de unos 600.000 dólares, tres veces lo que cuesta el superdeportivo al otro lado del charco. Como no podía ser de otra manera, han bautizado al «monstruo» como Lamborghini «Huracam».
El brazo telescópico estabilizado ha sido producido por Incline Dynamic Outlet, una empresa estadounidense especializada en gimbals profesionales para producciones cinematográficas. Sus sistemas han soportado el envite del mar en programas como «Deadly Catch» de Discovery Channel – llamado «Pesca Radical» en la traducción española – y velocidades de hasta 700 km/h anclados en un avión a reacción. A buen seguro pueden soportar los 322 km/h de velocidad punta de un Lamborghini Huracán. La parte más complicada ha sido anclar el sistema en el frontal del superdeportivo.
Para ello han recurrido a la ayuda de especialistas en mecanizado y estructuras, que han diseñado una base lo suficientemente sólida para su anclaje al subchasis frontal del Lamborghini. La cámara que han montado en el gimbal no es una cámara de vídeo amateur, es una impresionante Red Epic 8K, usada para grabar cine a resoluciones del mañana. Con esta cámara y usando el Lamborghini se podrán grabar planos extremadamente rápidos, persecuciones a alta velocidad y apenas a unos pocos centímetros del suelo. Acordaos de este coche cuando veáis Top Gear o la última de Transformers en unos pocos meses.
Fuente: The Drive
