¿A quién demonios podría ocurrírsele tal cosa? A un carpintero, faltaría más. La madera es uno de los materiales más desconocidos de cuantos se utilizan en la industria del automóvil, y hablo de un uso más allá de revestimientos interiores e inserciones (ver artículo: ¿Cómo se hace un Morgan Plus 8? Un coche de madera en la era del smartphone). Lo que cuesta más imaginar es que alguien haya decidido crear coches con una carrocería completamente esculpida en madera. Se llama Isaac Cohen, y lleva construyendo coches de madera desde hace 13 años.
La historia que nos cuenta Barcroft Cars en este vídeo es la de un carpintero que decidió dar rienda suelta a su habilidad con la madera para satisfacer otra de sus pasiones, la automoción. Fue entonces cuando, coincidiendo con su 50 cumpleaños, decidió ponerse manos a la obra y comenzar a fabricar su primer coche de madera, el Splinter, una empresa que le llevó hasta 14 horas de trabajo diarias. Su primera creación, Splinter, está compuesta por toda una serie de tiras de madera que, en fila, cubrirían un kilómetro y medio de distancia. El resultado, un inmenso vehículo de seis metros y medio de longitud.
Tras aquel rito iniciático, Isaac se propuso crear nuevos coches, aún más impresionantes, si cabe, que el anterior. Como Slider, un inmenso cabrio para pasear y el favorito de su creador.
En definitiva, una historia increíble que merece la pena ser contada.
En Diariomotor: