Porsche ha llevado a cabo la maravillosa -u osada, ya según cómo se vea- jugada de crear el Porsche 718 Spyder RS. O lo que es lo mismo, el que se alza como el último gran descapotable de la marca debido a que será el último 718 en utilizar un motor de combustión -¿ahora entendéis lo de «osada»?-. Y como mi cuenta corriente no me permite gastarme los 180.080 euros que cuesta el deportivo de Suttgart, me he tomado la libertad de jugar con este en su configurador.
Y es que, al fin de cuentas, los configuradores de coches de este calibre son un arma de doble filo. Por una parte podemos fantasear con el que sería nuestro 718 RS ideal; pero por otra darnos de bruces con la dura realidad de que nuestra economía no puede ayudarnos a acceder a este tipo de coches y nos tengamos que limitar a fantasear con él.
Ya puedes crear el Porsche 718 Spyder RS de tus sueños seas rico o no
Sea como fuere, yo he hecho lo propio y me he aventurado a jugar con las posibilidades que ofrece la firma alemana en su web. Y aunque bien es cierto que me hubiese gustado coquetear con los colores PTS de Porsche, en esta ocasión no he podido y me he «limitado» a usar los colores a los que cualquiera con el dinero suficiente para hacerse con un 718 Spyder RS podría acceder.
De esta manera, he optado por una configuración más bien conservadora o clásica -acepto también configuración de «abuelo prematuro»- protagonizada por la pintura Gris Vanadium en contraste con las llantas de magnesio forjado de 20 pulgadas rematadas en Neodyme -dorado-. A este maridaje hay que sumarle un interior con los asientos bucket tapizados en gris.
Y por si no fuera suficiente el seis cilindros bóxer atmosférico de 500 CV y 450 Nm de par, he optado también por el paquete Weissach. Con todo ello, la factura asciende hasta los 220.044 euros. ¿Lo mejor de todo -o peor, según cómo se vea-? Que tampoco me preocupa demasiado al no poder tampoco afrontar los 180.080 euros de los que parte, pero soñar es gratis.