Reconócelo, darías lo que fuera por tener un Dodge Viper. Yo también. Ahora imagina por un momento que junto a tu casa tienes un garaje con más de cien coches, entre los cuales hay 77 Dodge Viper. Una de las mayores colecciones de Dodge Viper – me atrevería a decir que la mayor – del mundo. Se trata de una pareja de Texas, de D’Ann y Wayne Rauh. Una pareja que profesa tanto amor por este deportivo estadounidense, como el que les ha mantenido unidos durante todos estos años.
D’Ann y Wayne quedaron prendados de las prestaciones y el aspecto del Dodge Viper. Tanto que en la última década comenzaron a acumular diferentes versiones hasta crear una de las mejores colecciones de deportivos que hayamos visto. Muchos jubilados, cuando dejan su trabajo, se dedican a diferentes aficiones, a coleccionar maquetas, a jugar a la petanca con los amigos. Pero cuando Wayne dejó su trabajo, en el negocio del transporte de hidrocarburos, se dedicó a coleccionar Vipers. En cualquier caso, cuando le preguntan acerca de ello, rechaza ser definido como un coleccionista, «la gente piensa que somos coleccionistas, pero no lo somos. Simplemente amamos al Viper, eso es todo» (Wall Street Journal).
Y eso es algo que sorprende cuando comprobamos que en su colección hay diferentes joyas, como el último Viper de cuarta generación fabricado, el último que salió de la línea de producción en 2010, decorado por dentro y por fuera en un llamativo tono dorado. Incluso contarían con una versión con la decoración de Spider-Man que fue utilizada durante la promoción de la película.
Los Rauh han ido acumulando diferentes versiones del Dodge Viper, desde la primera generación, de 1992, hasta el último SRT Viper. De entre todos ellos, habría incluso algunas versiones únicamente creadas para los circuitos, diferentes ACR-X, e incluso algún Viper de carreras (Top Gear)
Los hangares en los que almacenan la colección, no solo se han convertido en improvisados talleres, sino también en un auténtico museo Viper. Atesoran maquetas, carteles promocionales y un sinfín de productos relacionados con el Dodge Viper. Por supuesto, también acumulan otros deportivos, y otros coches, más o menos exclusivos, que no son Dodge Viper.
En 2013, se les concedió el honor de acudir a la factoría de Conner Avenue para recoger en la propia fábrica un nuevo coche, la primera unidad de la serie limitada a 150 del SRT Viper Launch Edition, la edición que inició la comercialización del nuevo SRT Viper (ver blog de Drive SRT).
Pero lo mejor es que disfrutéis de este espectacular vídeo que eGarage produjo hace unos años en su visita a la colección de los Rauh.
En Diariomotor: Entre deportivos únicos, Shooting-Brake y otras exquisiteces: la colección privada de Gianni Agnelli, L’Avvocato