Si existe un medio de transporte, y ese medio de transporte tiene un motor, existen grandes posibilidades de que alguien haya tratado de hacer carreras con ese vehículo. Es por ello que existen carreras de segadoras, competiciones de ascenso con cosechadoras e incluso competiciones con Ford Model T… y cerdos. Lo que posiblemente no sabías es que existe una asociación de drag racing sobre asfalto con motos de nieve. Tranquilo, vuelve a leerlo. Y en el vídeo de hoy vamos a ver a una moto de nieve, competir contra una Suzuki Hayabusa.
Sobre asfalto, y en una pista de drag racing. Estas pistas cuentan con una superficie preparada para la máxima adherencia, y en este caso, estaba limitada a un octavo de milla – poco más de 200 metros. La moto de nieve en cuestión es una Ski-Doo de BRP, fabricada en el año 1999. De serie no le queda prácticamente nada: su motor de 0,8 litros y tres cilindros es de dos tiempos y funciona con una mezcla de gasolina y óxido nitroso. No cuenta con patines, si no con unas pequeñas ruedas de nylon, pero retiene su transmisión mediante oruga de goma.
Solo el óxido nitroso aporta 60 CV de forma puntual, y si tenemos en cuenta que la moto de nieve termina el octavo de milla a 156,73 km/h, podemos sospechar que su nivel de potencia es realmente elevado. Con todo, la moto consigue superar los 6,63 segundos de la moto de nieve, por un margen estrecho y solo en la primera de dos lanzadas. La moto tampoco parece estar de serie: está aligerada, su basculante trasero es mucho más largo – para evitar caballitos – y su mecánica de 1,3 litros y 200 CV podría estar seriamente alterada.
Fotos de la Suzuki Hayabusa
Fuente: autoevolution