El Ferrari F12 TRS no es un deportivo cualquiera. Hablamos de uno de los cavallino rampante más exclusivos y exóticos, un one-off del que en realidad se habrían construido tres unidades, cada una de las cuales – según dicen – superarían los tres millones de euros. Algunos, incluso, se atreven a decir que todas ellas pertenecen a un mismo propietario. Lo habíamos visto en rojo, y ahora gracias a estas imágenes publicadas por The Supercar Kids, y V12 Supercars Photography, podemos contemplarlo en todo su esplendor con un detalle muy extravagante que nos ha dejado sin palabras. El escote de su capó hace que su motor de doce cilindros aparezca, completamente desnudo, y a la intemperie. ¿Qué otra solución se les podría haber ocurrido para impresionarnos tanto?
Las formas esculturales del capó, aún más agresivo, en el frontal, habrían sido perfiladas precisamente para que bastase con una lámina de plexiglass para permitirnos la visión del motor V12 que se esconde en su interior. En esta unidad, con un acabado de carrocería en gris plata, directamente se habría prescindido de lámina de plexiglass.
Y ese no sería el único detalle que distingue a este Ferrari F12 TRS de cualquier otro. El diseño de los faros también se ha modificado, la integración de los retrovisores, e incluso el diseño de la zaga, que acoge un inmenso difusor con dos salidas de escape centrales y un buen alerón, con un aspecto digno de un GT de carreras.
Estas imágenes habrían sido tomadas en Roma, en el arranque del tour de cavallinos rampantes, la Ferrari Cavalcade 2015, que se celebró en Italia hace unos días.
En Diariomotor: Ferrari F12 TRS: el orgullo y el precio de tener un Ferrari único