Tengáis una economía bien saneada o no, todo amante de los coches que se precie fantasea con Ferrari. Y es que estamos hablando de una de las firmas de superdeportivos más emblemáticas de todos los tiempos. Pero como suele ser habitual, uno no tiene la capacidad para poder hacerse con uno de sus retoños, así que nos tenemos que conformar con ver cómo nacen estos.
Y esto nos los permite el fastuoso vídeo que hoy nos ocupa: parte del ciclo de la vida dentro de Maranello. Concretamente, somos testigos de cómo se fabrican diversos modelos de la firma italiana, pero llama poderosamente la atención el momento en el que se ensamblan los Ferrari Monza SP1 y SP2, dos de los coches más exclusivos de la marca.
Tengas mucho dinero o no, disfruta de la fábrica de Ferrari en acción
Aunque bien es cierto que gran parte del proceso artesanal que se vivía otrora se ha perdido en pro de uno automatizado mucho más rápido, podemos seguir encontrando detalles en los que la participación humana resulta crucial en una marca como Ferrari. Rápidamente lo percibimos en los primeros segundos del vídeo mientras se fabrica un SF90 Stradale.
Y es que cuando este llega a la zona de pintura, vemos como diversos operarios marcan las líneas de las franjas del capó y techo por medio de unas cintas que colocan a mano. Sea como fuere, de esta fase sale coche tras haber recibido el mítico Cavallino Rampante para proseguir con el montaje del habitáculo.
Pero lógicamente el momento más emocionante es cuando motor y superdeportivo se unen. Al fin de cuentas el proceso no difiere demasiado del que experimenta un vehículo normal y corriente; pero aquí estamos hablando de un binomio protagonizado, por una parte, por motores V6, V8 y V12, mecánicas que ya sabemos que están en proceso de extinción.