«Herejes», «vejadores», «traidores», «pecadores» y un montón de epítetos han caído sin piedad sobre Ferrari por sucumbir ante aquello de lo que estaba renegando hasta la fecha: los SUV. Pero el mercado manda, y cuando firmas como Lamborghini, Bentley o Maserati se hinchan a vender SUV de altas prestaciones los del Cavallino Rampante no querían quedarse sin su trozo del pastel. ¿La gran diferencia entre Ferrari y sus competidores? Que el Purosangue, su «pecado», tiene un motor V12 atmosférico que te enamorará irremediablemente pese a que juraste nunca hacerlo de un SUV.
Y es que en estos tiempos convulsos en los que la hibridación es ya casi la única forma para poder seguir recurriendo a motores de combustión aparezca un doce cilindros atmosférico es digno de admirar. Y es digno de admirar ya sea en formato SUV o cualquier otro, y el celestial sonido del Purosangue no nos da otra alternativa que caer rendidos ante sus pies.
Así es el V12 del mayor «pecado» de Ferrari que hará que te enamores irremediablemente de este
¿Podría haber sido el Ferrari Purosangue una berlina? Sí, y se habría aplaudido. Pero tal y como dictamina el mercado nos hemos encontrado con una carcasa a modo de SUV para albergar a la que posiblemente sea la última iteración del V12 atmosférico de Ferrari. Y qué carcasa, porque al fin de cuentas tampoco estamos hablando de un SUV normal y corriente.
Viniendo de Ferrari no podíamos esperar otra cosa que no fuese un diseño bien esculpido para su primer coche de cinco puertas. Pero el verdadero punto álgido de este es el legado que recoge de los GTC4Lusso, FF y compañía: un V12 de 6.5 litros atmosférico capaz de erogar 725 CV y 716 Nm de par.
El régimen de giro máximo está situado a 8.250 revoluciones por minuto, o lo que es lo mismo, buscar la notas más aguda que es capaz de alcanzar el tenor de Ferrari. Una melodía que evoca a creaciones tan extrañas y curiosas como el Lamborghini LM-001, pero que ningún otro SUV de la competencia podrá lograr con sus propulsores sobrealimentado por turbo. Ya veremos si el Ferrari Purosangue es capaz de superarlos en otros terrenos.