La capacidad humana para inventar no tiene fin. Hoy en día, la práctica totalidad de vehículos nuevos tienen un sistema de aire acondicionado. Estos sistemas enfrían el aire y nos permiten disfrutar cómodamente de temperaturas de 22 grados mientras la ciudad se funde a 40 grados en el exterior. Estos sistemas también secan el aire, cuya condensación tiene como subproducto agua líquida. Este agua es expulsada del vehículo, y perdida. Hasta ahora: los ingenieros de Ford quieren convertir la condensación en agua potable.
Ha sido idea de Doug Martin, un ingeniero de motores de Ford. Ha instalado un depósito adicional junto al condensador del aire acondicionado, y mediante una simple tubería, el agua es trasladada a un pequeño grifo, situado junto a los huecos portabebidas de la consola central. Antes de acabar en un vaso, el agua pasa por un filtro de 0,1 micras, que elimina contaminantes o partículas en suspensión. El sistema permite generar hasta dos litros de agua a la hora, en función de la humedad del aire.
Este sistema no generará la misma cantidad de agua en mitad de Extremadura que en la costa de Murcia, lógicamente. Bautizado como On-the-Go H2O, eliminaría la necesidad de comprar botellas de agua antes de emprender un viaje, y en países con problemas de suministro de agua, posibilitaría un suministro constante de agua limpia. La idea es francamente buena, aunque su implantación en vehículos de producción parece aún muy lejana – y posiblemente inviable económicamente.
Sea como fuere, es una gran idea, que el propio ingeniero explica en vídeo. Me parece ideal especialmente en autocaravanas y vehículos de aventura.
En Diariomotor: