El Honda S2000 es uno de los coches más apasionantes de las últimas dos décadas. Un roadster biplaza de propulsión, dotado de un motor de 2,0 litros capaz de superar los 240 CV sin necesidad de sobrealimentación, y de girar a nada menos que 9.000 rpm. Es un coche donde el verdadero protagonista es el motor, y es por ello que crear un Honda S2000 eléctrico parece una auténtica blasfemia, una herejía. Sin embargo, los creadores de este S2000 de cero emisiones son verdaderos petrolheads, y han creado una obra de arte.
Los creadores son los chicos de Rywire Motorsport, un taller especialista en electrónica y cableado, pero que desde hace años, crea preparaciones muy limpias y con una extrema atención al detalle. Todo comenzó con un Honda S2000 en muy mal estado, sin motor. Bajo su capó se instalaron varios módulos de batería procedentes de un Chevrolet Volt, con una capacidad combinada de unos 30 kWh. En su parte trasera se instaló un subchasis procedente de un Tesla, un conjunto motriz consistente en un motor eléctrico y un diferencial autoblocante.
El coche desarrolla la friolera de 500 CV y es una maravilla dinámica, en palabras de su creador. Estéticamente es un coche muy radical, diferente a todo lo visto anteriormente. Sus llantas aerodinámicas me parecen impresionantes, y el paragolpes delantero inspirado en la gama I.D. de Volkswagen – sí, has leído bien – es inesperadamente acertado. El interior se ha recubierto en Alcantara de color negro, se ha instalado una instrumentación a medida y se ha mecanizado un precioso selector para la caja de cambios.
En Build Biology, uno de los shows del canal de Hoonigan, explican con todo lujo de detalles todos los recovecos del vehículo, de la mano de su creador. No os lo podéis perder.
