A estas alturas de la fiesta creo que no hace falta que os presentemos al Tesla Model S. La berlina eléctrica más rápida del mundo y posiblemente la berlina en general más rápida del momento. Teniendo en cuenta que es capaz de acelerar hasta los 100 km/h en tres segundos gracias a sus bestiales 700 CV de potencia y sistema de tracción total, dicha afirmación no es descabellada. Y el nuevo Tesla Model S P90D tiene un curioso «huevo de pascua» escondido en su avanzado sistema de infoentretenimiento.
Os recuerdo que no es la primera vez que Tesla esconde «huevos de pascua» en sus coches. Un «huevo de pascua» es un guiño, una broma, una curiosidad oculta, común en algunos videojuegos o programas informáticos. Hace un tiempo hacíamos una recopilación de «huevos de pascua» ocultos en los coches, pero eran en su gran parte de índole física, visibles si sabíamos donde mirar. Tesla nos soprendía hace un tiempo permitiéndonos convertir nuestro Model S en el Lotus Esprit sumergible de James Bond. Y ahora nos permitirá ser Han Solo.
O Chewbacca, si lo prefieres. Y es que tocando de forma repetida la tecla que activa el modo «Ludicrous» – su nombre ya es casi un chiste – donde el coche entrega la máxima aceleración, la pantalla se oscurece y aparecen estrellas, que avanzan hacia nosotros a cada vez más velocidad. Claramente, imita a la entrada en la «hipervelocidad», hecha popular de idéntica manera por Star Wars, entre otras sagas de ciencia ficción. Un «huevo de pascua» que puedes descubrir en el siguiente vídeo.
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