Opel ha renovado al Opel Mokka, añadiéndole una X en su nombre, dejándonos con un Opel Mokka X, que por el camino ha recibido mejoras en su diseño exterior, un nuevo motor gasolina y sobre todo cambios en su habitáculo y en su equipamiento. La comparación entre el salpicadero del nuevo Opel Mokka X y aquel Opel Mokka que conocimos en 2012 es obligatoria:
De los «miles» de botones pequeños a la mayor simplicidad de la pantalla táctil, protagonista del salpicadero:
De los miles de botones, pequeños y acaparando el protagonismo de la consola central a un nuevo sistema multimedia que abandona ese segundo lugar sobre el salpicadero al que había sido relegado para ocupar una posición más lógica, cómoda y visual en la parte central, mejor integrado.
Este nuevo sistema multimedia, con una pantalla táctil de 7 u 8 pulgadas en función de la versión, incluye además importantes novedades en lo que a conectividad se refiere, haciendo gala ahora de los sistemas Apple CarPlay y Android Auto, permitiéndonos “proyectar” la pantalla de nuestro móvil en este soporte multimedia.
Sólo han pasado 4 años entre estos dos salpicaderos… y vaya evolución. Si tenemos en cuenta algunos de los últimos concepts y el camino que han tomado ya algunos coches de producción de otras marcas podemos imaginarnos ya dentro de 4 años hablando de lo recargada que estaba la consola con los mandos de la climatización (en lugar de estar integrados en la pantalla táctil) o como los volantes multifunción no contaban todavía con superficies táctiles… y sólo habrán pasado 4 años.