Nos encanta Koenigsegg. Es una empresa que siempre ha permanecido fiel a sus orígenes, luchando contra rivales mucho más grandes y con mayor potencia financiera. Con sólo 70 empleados fijos, se han sacado de la manga coches como el Regera, que es posiblemente el superdeportivo más innovador y especial del momento. Hacen las cosas bien en definitiva. Tras la muerte de Prince la pasada semana, han rendido homenaje a la estrella de la música con un Regera de color morado, que han bautizado como «Lila Regera».
«Lila Regera» se traduce como «Purple Reign» – reinado púrpura en castellano – en inglés, que suena de forma muy parecida a «Purple Rain», el éxito más conocido de Prince. La canción del año 1984 se ha convertido en el himno del fallecido artista, y ha sido la pieza central de los múltiples homenajes – por ejemplo, edificios emblemáticos teñidos de color púrpura. El Regera que Koenigsegg ha mostrado en sus redes sociales es simplemente una recreación, pero no me extrañaría que terminasen produciendo alguna unidad en dicho color.
Porque ya lo han hecho antes. Unas horas tras la muerte del artista, Christian von Koenigsegg y su equipo tuiteaban una imagen de un Koenigsegg CCXR de color morado, pasando revisión en la sede de la marca. Un coche en posesión de alguno de sus clientes, que han rescatado de forma cuidadosa como sencillo homenaje. El tributo de la marca a uno de los últimos grandes músicos – que se suma a David Bowie en un 2016 trágico para el mundo de la música – ha sido sencillo pero efectivo.
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