En Estados Unidos el 4 de julio es un día que se conmemora por todo lo alto para celebrar la independencia del país respecto al Imperio Británico por allá en 1776. Normalmente se lanzan fuegos artificiales y se hace una buena cena, pero ahora existe una nueva tradición: una carrera de coches «autónomos» que no es como te la imaginabas, ya que se lanzan desde un barranco.
Y es que esto mismo sucede 4 de julio tras 4 de julio en busca de hacer una celebración… atípica. Concretamente se lleva a cabo en Alaska desde, al menos, hace 6 años, buscando alejarse de los típicos fuegos artificiales y acercarse a algo más aventurero.
La carrera más bizarra de coches se hace en Alaska, sin conductor y para celebrar el 4 de julio
El objetivo es fácil y claro: ver quién lanza más lejos y mejor su coche. Y es que allí acuden cientos de orgullos americanos con coches destartalados que lanzan barranco abajo con la intención de ver cómo se destripa. En algunos casos se atreven a instalar una cámara en el interior del vehículo para ver el resultado desde dentro, pero el puro entretenimiento reside en el lanzamiento en sí.
Lógicamente esta carrera se hace sin conductor, y se recurren a métodos como insertar el coche en un carril para lanzarlo o uno menos sofisticado como bloquear la dirección y poner peso en el acelerador. Todos los coches que se lanzan tienen al menos capacidad para moverse, logrando así mejores lanzamientos.
No sabemos qué tiene que ver con el 4 de julio, pero desde luego los espectadores disfrutan de este lanzamiento a una distancia prudencial, aunque el mayor peligro reside en que los coches se incendien en mitad de la vegetación, provocando que el fuego se expanda.