A Mercedes-Benz no se le ha ocurrido otra locura que celebrar el April Fools’ Day presentando una furgoneta ultradeportiva. La Mercedes-AMG Sprinter 63 S contaría con un motor V8 biturbo de 4.0 litros y más de 500 CV de potencia, suspensiones deportivas y rebajadas, llantas AMG, kit de carrocería y un sinfín de elementos heredados de los deportivos de Affalterbach. Una locura que – lo creas o no – quizás no lo sea tanto.
La excusa ficticia para equipar a su furgoneta con un motor tan potente estaría en la necesidad de llevar una carga más voluminosa. Pero si miramos atrás y seguimos la evolución de la línea de producto de Mercedes-Benz, la posibilidad de que Mercedes-AMG realice algo parecido deja de ser una broma.
Pensemos que Mercedes-Benz ha apostado con fuerza por la transformación de un vehículo comercial, como la Mercedes Vito, en un elegante, cómodo y lujoso minivan, en un gran monovolumen, más conocido como Mercedes Clase V. Y ese concepto de automóvil ha evolucionado hasta ideas, como el prototipo Mercedes Concept V-ision Plug-In Hybrid presentado en el Salón de Ginebra, que nos recuerdan que la posibilidad de que una furgoneta acabe transformada en una limusina de lujo no es, ni mucho menos, descabellada.
De hecho, pienso que es cuestión de tiempo que veamos en los concesionarios una versión más lujosa y confortable de la Mercedes Clase V, digna de chófer, basada en este prototipo. Y de ahí, a una versión potente, e incluso deportiva, firmada por Mercedes-AMG, apenas hay un paso. Y esto os aseguro que no es ninguna broma.
Pero, de momento, no parece que Mercedes-AMG vaya a lanzar furgonetas deportivas. Lo sentimos…
Fuente: Mercedes-Benz
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