Sucedió hace unos días, en la localidad de San Bartolomé, Murcia. Un motorista circulaba en su motocicleta Yamaha, cuando una patrulla de la Policía Local le detuvo tras haberse saltado supuestamente un semáforo. Pero su verdadera sorpresa llegó cuando se encontró con la siguiente multa: 200€ de sanción por «no utilizar el pasajero del vehículo, mayor de 12 años y con altura superior a 135 centímetros, el cinturón de seguridad o sistema de retención homologado y correctamente abrochado».
Según la historia que publica el diario La Verdad de Murcia, el supuesto infractor habría sido reprimido únicamente por saltarse un semáforo. En esta situación, habría discutido con el agente, y ahí habría sido cuando este, en un error con el aparato utilizado para emitir las sanciones, se habría equivocado y habría emitido una sanción que evidentemente no se corresponde con las especificaciones técnicas de una Yamaha YF250R.
El error no solo ha dejado al protagonista de esta situación, incluso cómica, con una historia curiosa que contar a los amigos, sino también con el buen sabor de boca de haberse librado de la verdadera multa que quería imponerle el agente de la Policía Local. Una sanción que no responde a los requisitos técnicos de una motocicleta como la suya no va a prosperar, y además de no prosperar esta sanción, se librará de la multa por supuestamente haberse saltado un semáforo en rojo.
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