¿Sería una locura lanzar un Nissan GT-R con carrocería de tipo «shooting-brake»? Ni mucho menos. La trasera hatchback no tendría por qué sentarle mal, aunque perdería una de las vistas más agradecidas de su silueta y habría que encontrar un sitio en el que encajar un buen alerón que haga justicia a un nombre como GT-R. No está previsto un Nissan GT-R «familiar», ni mucho menos. Lo que ves es una recreación de Rain Prisk Designs, que nos demuestra que la idea, por extraña que parezca, tiene sentido. Incluso Ferrari dispone de un deportivo de estas características.
Los «shooting-brake» tienen una única razón de ser, la practicidad. Gozar de un maletero amplio y accesible y dos plazas traseras más cómodas y espaciosas, por ejemplo en altura, que las disponibles en un coupé 2+2 como el Nissan GT-R. La historia de los «shooting-brake», por otro lado, se remonta a la época en la que ni tan siquiera existían los coches. El término «shooting-brake» ya se utilizaba en Inglaterra para definir a los carruajes, tirados por caballos, que se utilizaban en el Siglo XIX para salir a cazar. Hoy en día es común utilizar el término para vehículos, generalmente de tres puertas, que entremezclan el concepto del coupé y el familiar.
Aún no te eches las manos a la cabeza. Ya habíamos visto con anterioridad un Nissan GT-R de tipo «shooting-brake» o, mejor dicho, Wagon. Y para nuestra desgracia, ese era real…
Fuente: Rain Prisk Designs | Vía: GT Spirit
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