¿Tu peor pesadilla? ¿O una valiosa lección? Sucedió en la ciudad australiana de Perth. Un adolescente de 17 años acababa de estrenar coche, concretamente un Nissan Skyline GT-R R33. Visto en retrospectiva, puede que no sea el mejor coche para un nóvel, y menos para un nóvel de 17 años. Todos hemos hecho tonterías con los coches en esas edades, pero las tonterías pueden terminar en un desastre – o tragedia – más fácilmente con un deportivo de 280 CV, que con un Peugeot con motor diésel de 70 CV.
En Australia es posible conducir legalmente a los 17 años. El conductor del Nissan Skyline GT-R R33 lo había comprado como primer coche, y sólo una hora después de estrenarlo, lo estrellaba contra una casa en un barrio residencial. Por fortuna, ni el conductor ni sus amigos – que iban en el coche – han resultado heridos, y sólo ha habido que lamentar daños materiales. Aunque el Nissan Skyline se ve entero, probablemente haya sufrido daños de consideración al impactar contra la vivienda.
No hay más detalles acerca de la historia, pero todos podemos imaginarnos qué ocurrió. La presión de los amigotes, un coche demasiado potente y poca experiencia de conducción son los ingredientes de un cóctel que puede torcerse muy fácilmente. «Eh, haz un derrape en esa esquina», y de repente, el coche se convierte en un ornamento de jardín de una vivienda residencial. Un coche más sencillo, barato y menos potente es definitivamente una mejor opción que un Nissan Skyline GT-R para un conductor nóvel.
Fuente: 7PerthNews
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