Sí, en Petrolicious lo han vuelto a hacer. Han vuelto a dar vida a una pieza audiovisual de esas que desde el primer segundo percibes que se merecen ser consumidas con toda la atención del mundo, con deleite, pausa y con la mente dispuesta a dejarse inspirar. A los amantes del “JDM” en general y de Toyota en particular les va a gustar… los protagonistas son un Toyota GT 86 y un Toyota AE 86.
31 años de diferencia separan a estas dos monturas, a estos dos hachi-roku que pertenecen a Ron Ng quien durante algo más de 8 minutos nos relata los lazos que unen a ambos coupés, todo ello maridado con la gran ejecución habitual en la filmación y la exquisita banda sonora mecánica de ambas monturas, sin aditivos.
Las carreteras idílicas de SoCal (el sur de California) sirven de perfecto escenario.
112 caballos exprimidos desde un motor de 1.6 litros a un lado, de la mano del 86 clásico… 200 caballos al otro de la mano de su predecesor… y en ambos esa sensación de estar ante una máquina hecha para disfrutar, hecha para plantarnos una buena sonrisilla a aquellos que sudamos gasolina.
Evidentemente no es casualidad que el vídeo de estos dos Toyota se haya publicado el día de San Valentin. «El amor por los Toyota 86 es eterno» han titulado a este nuevo vídeo… y desde luego no cabe la menor duda que teniendo un Toyota GT 86 y un AE 86 en el garaje tienes que ser un enamorado de lo que este número representa en el automovilismo.
Resérvate ocho minutos y medio, sube el volumen y dale al play… hay dos “86” esperándote.