Nürburgring es a los petrolheads lo que La Meca a la religión islámica o un Starbucks al postureta tipo. Un lugar sagrado donde reencontrarse con tu espíritu interior y con tu yo exterior, en una simbiosis entre mente y cuerpo que, en nuestro caso, se embriaga ante el olor a gasolina y goma quemada. Y qué mejor forma de quemar esa gasolina que en motores de seis cilindros opuestos firmados por Porsche… En sus 911 GT3 RS. Si ahora unimos Nürburgring y Porsche 911 GT3 RS, muchísimos 911 GT3 RS, tenemos probablemente un cocktail perfecto.
Es el caso del vídeo que traemos aquí: una producción de poco más de 11 minutos que merece ser vista y escuchada de principio a fin. Y es que, aunque es frecuente ver rodar en el Infierno Verde a deportivos de toda índole, no es tan corriente ver un convoy de un mismo modelo, un modelo que además es muy especial.
Hay GT3 y GT3 RS de varias generaciones e incluso algún ejemplar de la exclusiva -y venerada- versión GT3 RS 4.0 del 997. Sin embargo, esta fiesta no es exclusiva del 911 GT3 y también se dejan ver varios Cayman GT4, una de las últimas joyas de la marca, 997 GT2 RS (el 911 más potente fabricado nunca), 991 Turbo e incluso algunos ejemplares de generaciones más antiguas como las 964 y 993.
Como recordatorio, quepa mencionar que el 911 GT3 RS es una máquina pensada para los circuitos, más ligera y potente aún que el 911 GT3, con 500 CV extraídos de un motor de seis cilindros opuestos y 4 litros de cilindrada, con lubricación por cárter seco y capaz de estirarse hasta casi las 9000 rpm. Monta el cambio PDK de doble embrague y siete relaciones gracias al cual pasa de 0 a 100 km/h en sólo 3,3 segundos y alcanza los 310 Km/h y de serie equipa también el eje trasero direccional: un sistema gracias al cual se gana estabilidad en el paso por curva (a gran velocidad las cuatro ruedas giran en el mismo sentido) a la vez que permite radios de giro más pequeños en las maniobras a baja velocidad. En definitiva, un coche pensado para los circuitos que en Nürburgring se sentirá como pez en el agua.
Fuente: YouTube
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