Hemos tenido la oportunidad de ponernos tras el volante de una berlina premium del segmento E que se sale del trío de alternativas germanas. No es un Mercedes, no es un BMW ni es Audi, tampoco es japonés ni es norteamericano, aunque este mercado es uno de los principales destinos de esta montura de la que tanto tenemos que hablar de su plazas traseras. Cómodo, espacioso, con un buen número de buenos detalles y sorprendentemente muy pensado para ser utilizado de la mano de un chofer.
Hablamos del Hyundai Genesis, de la berlina de representación del segmento E de Hyundai, un coche que, enfocado al mercado norteamericano y coreano, nos propone una excelente alternativa entre las premium habituales ofreciéndonos una buena imagen, una buena habitabilidad interior, un buen nivel de equipamiento y buenos ajustes y materiales.
Entre sus múltiples encantos, de los que daremos buena cuenta próximamente, nos encontramos con unas plazas traseras que, además de amplias y confortables, nos ofrecen una nueva perspectiva de esta berlina, convirtiendo al Genesis en una pequeña limusina al permitirnos operar desde el reposabrazos trasero elementos como la climatización de los asientos, su posición, la cortinilla trasera o el sistema de sonido.
Más allá de los mandos del reposabrazos central el ocupante de la plaza situada tras el copiloto puede incluso manejar la posición del asiento delantero con un botón situado en el lateral de este asiento delantero.
Más sobre el Hyundai Genesis
Un V6 gasolina de 3.8 litros, 315 caballos, una caja de cambios automática de 8 velocidades, tracción total… pronto te contaremos nuestras impresiones tras probarlo, pero mientras puedes leer más sobre el Hyundai Genesis en el artículo “Hyundai Genesis: en España por 67.750 euros”.