El titular es mucho más llamativo en inglés, aunque me cueste reconocerlo. En EE.UU. se celebran anualmente competiciones de velocidad, en las que una de las pruebas estrellas es la «Standing Mile». Los coches arrancan desde parado, y gana el que más velocidad alcance al pasar la línea de meta, situada a una milla (1,6 kilómetros) de la salida. En la Texas Mile – el evento de este estilo más famoso de EE.UU. – el Ford GT de M2K Motorsports ha superado por primera vez las 300 millas por hora. Concretamente ha alcanzado 300,4 millas por hora, unos escalofriantes 483,4 km/h en el mundo métrico.
Por supuesto, este Ford GT no es un coche de serie. Ni muchísimo menos. Pero sorprendentemente, aún puede circular legalmente en las carreteras de Estados Unidos. Estéticamente tiene un aspecto conservador, con los clásicos colores de Gulf Racing y las preciosas llantas que el coche llevaba de serie. Bajo su capó la cosa cambia por completo. Sigue empleando el mismo 5.4 V8 de serie, pero el motor ha perdido el compresor, para pasar a estar sobrealimentado por dos turbocompresores – que soplan a una presión superior a los 3 bar. El resultado es una potencia estimada de unos 2.500 CV.
El motor está alimentado por metanol en este tipo de eventos, con el que entrega su máximo potencial. Tras varias pasadas en las que se queda a las puertas de las 300 millas por hora, el coche de M2K Motorsport alcanza una cifra de 300,4 millas por hora sobre el asfalto texano. Una impresionante cifra, que requiere del despliegue de un paracaídas para efectuar la frenada. Aunque este récord en un coche modificado no supone una amenaza para marcas como Koenigsegg o Bugatti, tened por seguro que siguen este tipo de iniciativas muy de cerca. Sobre estas líneas tenéis el vídeo del récord.
Fuente: Autoblog