¿Os acordáis del vídeo del reventón de una rueda a 250 km/h? Aquél reventón terminó con parte de la carrocería del Ford Mustang GT que estaba en un dinamómetro, con gran violencia. ¿Qué ocurre cuando una rueda de un coche de competición revienta a 300 km/h en pleno apoyo? Pues nada bueno, como el vídeo que os vamos a enseñar demuestra. Se trata de un Porsche 911 RSR en el circuito de Daytona. Su rueda trasera derecha revienta en pleno apoyo, y lo que sigue a continuación es una increíble demostración de pilotaje.
Si un neumático explota y tenemos suerte, el neumático permanecerá alojado en la llanta. Pero a tanta velocidad, un reventón asegura prácticamente que trozos del neumático causen graves daños en carrocería y suspensión. En el vídeo que podéis ver a continuación, el reventón provoca que trozos del paragolpes y la carrocería salgan despedidos, evitando por poco al coche que el RSR acababa de adelantar. Y lo que viene a continuación es una demostración de pilotaje sin igual. O pura suerte, según se mire.
Y digo pura suerte porque se ve como en el vídeo el piloto tiene su mano derecha bastante tiempo fuera del volante. Precisamente, en el anterior plano inclinado del circuito, donde se produce el reventón segundos después. Ha tenido suerte, pero ha sabido controlar el coche, evitando un accidente y evitando chocar con otros coches. Definitivamente, ha vuelto a nacer y ha aprendido la lección de mantener siempre las dos manos sobre el volante.
Fuente: Axis of Oversteer
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