Sufrir un accidente de coche no es divertido y probablemente sea una de las experiencias más traumáticas que puede vivir una persona. Incluso para un piloto profesional, que está acostumbrado a sufrir accidentes, que al final son la consecuencia de pilotar al límite, perder el control del coche y quedar a merced de la física, y si crees en ello, de la suerte, es probablemente la situación más dura a la que ha de enfrentarse. De ahí que haya que valorar aún más que Richard Hammond se haya puesto delante de una cámara dos semanas después de su accidente, haberse salido de una carretera, haber volado durante decenas de metros dando varias vueltas de campana y cayendo por un terraplén, de que el coche que pilotaba quedase volcado y se incendiara y de que tuviera que ser rescatado.
No era el primer accidente de importancia para Richard Hammond y ni tan siquiera el más grave. Cuando en 2006 sufrió un accidente en el rodaje de un programa de Top Gear, el propio Richard decidió contar su experiencia en Top Gear y pedir que, tras ese programa, jamás se volviera a hablar del tema.
En esta ocasión, Richard Hammond se ha reunido con Mate Rimac, CEO de Rimac Automobili, y por lo tanto responsable de la marca que ha desarrollado el coche en el que sufrió el accidente, para recordar cómo sucedió todo. Una reunión aún más interesante si tenemos en cuenta los roces que hubo entre Rimac y el equipo de The Grand Tour tras el accidente. Y sobre todo para recordarnos que, cuando se compite, o cuando se conduce un deportivo a alta velocidad, siempre existen riesgos.
Una entrevista interesante, por la experiencia en sí, y por cómo incluso de un suceso tan desagradable como este, siempre se puede sacar algo positivo, por ejemplo como conductor, o para hacer que un coche como este sea más seguro.
El vídeo completo – son más de 26 minutos – lo podéis ver en la propia página web de DRIVETRIBE.
