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Escucha y contempla el infernal rugido de la Kawasaki Ninja H2R

Estoy enamorado de la Kawasaki Ninja H2R. Es la moto más potente jamás creada por parte de un fabricante generalista y una de las primeras en emplear desde la fábrica un sistema de sobrealimentación por compresor. La versión de calle del Bugatti Veyron de las motos es la Kawasaki Ninja H2 y tiene 200 CV, pero la versión Ninja H2R es la que da rienda suelta al potencial de la bestia que tiene por propulsor. 300 CV son los que desarrolla la brutal Ninja H2R y si pensabas que su sonido sería diferente o menos personal por ser sobrealimentada… te equivocas.

Subid el volumen de los altavoces ahora mismo.

Y se abren las puertas del infierno…

En el vídeo la moto está montada sobre rodillos, y rodeada de gente que debería llevar protección auditiva. Porque el sonido que emana de su escape – sin silenciador, es una moto destinada a los circuitos – es el mismo sonido que emana de las puertas del infierno. Atronador, agudo y con un volumen destinado a romper tímpanos y cristales. En el fondo son 300 CV abalanzándose sobre la pobre rueda trasera, furia contenida que pide rectas kilométricas y un piloto con unas agallas – por no decir otra parte de la anatomía masculina – verdaderamente grandes.

Y cuando digo contemplar el sonido de la Kawasaki Ninja H2R no estoy cayendo en una incongruencia lingüística. Es increíble comprobar como el escape comienza a ponerse al rojo vivo, y como al llegar al corte de inyección ese mismo escape emana unas llamadas y unos chispazos en los que se podría asar carne. Verdaderamente impresionante. Pero basta ya de cháchara, es hora de que comprobéis por vosotros mismos de lo que estamos hablando. El Bugatti Veyron de las motos nos sigue impresionando, y creo que lo seguirá haciendo mucho tiempo…

En Diariomotor: El Veyron de las motos se llama Kawasaki Ninja H2R y tiene 300 CV

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Sergio Álvarez

Aunque es técnico en comercio internacional de formación, los coches han sido su pasión (incluso obsesión) desde que apenas levantaba un metro del suelo y sus padres le regalaron un Ferrari rojo a pedales. Su afición se ha profesionalizado en Diariomotor, donde está presente desde 2008. Seguir leyendo...

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