Olvidémonos, de momento, de la posibilidad de que Ferrari lance un SUV. El Lada Niva sigue siendo uno de los todoterreno más venerados, por su larga trayectoria – puesto que lleva en producción desde los años setenta – y por las posibilidades que ofrece a aquellos que se quieran iniciar en el mundo de las cuatro ruedas motrices. Pero lo que nos hubiera costado imaginar es que un Lada Niva pudiera convertirse en toda una fiera fuera del asfalto con un trasplante inesperado, el corazón de ocho cilindros de un Ferrari. Y a juzgar por este vídeo el resultado fue tan espectacular como cabría esperar.
Decían en Jalopnik que este Lada Niva hizo sus pinitos en Italia en los años noventa y que sus creadores tuvieron la feliz idea de trasplantar el motor V8 de Ferrari que por aquel entonces utilizaba un sedán muy venerado y conocido por los aficionados a los automóviles, el del Lancia Thema 8.32. De este sedán se fabricarían menos de 4.000 unidades, las cuales hoy en día cotizan alto, muy alto. En nuestro país es tristemente conocido por ser el coche en el que falleció el jugador de baloncesto Fernando Martín, tras sufrir un accidente en Madrid en 1989.
No contentos con sus 215 CV, aumentaron su potencia hasta los 300 CV e instalaron una nueva transmisión con un diseño inteligente que hiciera que estuviera directamente conectado al tren delantero sin necesidad de diferenciales complejos y pesados. La preparación se completó con un nuevo sistema de suspensiones, amortiguación ajustable y otras chucherías
Fuente: Ladaniva.it | Vía: Jalopnik
Nota: el de las fotos no es el Lada Niva con motor Ferrari, sino un Lada Niva normal y corriente