¿Cómo se pueden provocar más de 100.000 dólares en daños en 60 segundos? ¿Cómo se puede arrasar un túnel de lavado con un coche en menos de un minuto? Ante nosotros un nuevo misterio con aparente explicación que, por poco convincente que siga resultando, debe recordarnos que llegado un momento en que nuestras facultades no sean las idóneas, deberíamos dejar de conducir. Un conductor de edad avanzada, una confusión entre el pedal del acelerador y el freno, y la tragedia es inevitable.
El vídeo que acompaña esta entrada ha sido publicado por la propia cadena estadounidense de túneles de lavado para coches. De ahí esa machacona melodía. Los responsables del túnel de lavado no solo no han tenido problemas en compartir este vídeo en el que se ve todo el proceso destructivo desde la entrada del túnel de lavado, pasando por todas las etapas, hasta la colisión final que frenó el coche, desde las cámaras de seguridad de sus instalaciones. Incluso quitan hierro al asunto reconociendo que los cuantiosos daños provocados por este conductor no son importantes, que tan solo se trata de un asunto del que la aseguradora ya se ha encargado y que en unos días sus instalaciones fueron reparadas.
El coche atravesó a toda velocidad las diferentes etapas de lavado llevándose consigo cualquier obstáculo que se encontrase por delante, incluidos los rodillos, estrellándose finalmente con una de las columnas del aparcamiento que se encontraba justo a la salida del túnel de lavado. La explicación que daría el conductor, un anciano de 92 años, sería la de una aceleración descontrolada por lo que parece una mezcla de factores, incluida la falta de pericia, el nerviosismo de la situación y la confusión entre acelerador y freno.
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