He de reconocer que el mundo del drag racing siempre me ha llamado mucho la atención. Es un mundo en el que las décimas de segundo son importantísimas, en el que no se permiten las pérdidas de tracción, y es un mundo donde se ven preparaciones de verdadera locura. Tras aquél SEAT Arosa con más de 500 CV que os enseñamos el año pasado, es hora de conocer a un Volkswagen Lupo, equipado con un motor 2.0 TDI potenciado hasta los 500 CV, y asociado a un sistema de tracción integral. No es rápido, ¡es fulgurante!
El coche ha participado en varios eventos de aceleración en Portugal – corregidme si me equivoco, por favor – y en ellos ha logrado tiempos de unos 11 segundos en el cuarto de milla. Un tiempo modesto, que podemos atribuir a una pista en condiciones no óptimas, con lanzadas sin preparación, sin burnout previo. Además, parece que el coche usa una caja de cambios manual reforzada, lo que contribuiría a estos tiempos. Con todo, son tiempos de un Nissan GT-R NISMO en unas condiciones óptimas.
Al César lo que es del César: esta pequeña pelotilla tiene una aceleración y unas prestaciones fulgurantes. Que se lo digan al BMW 335d xDrive de 480 CV al que humilló sin contemplaciones. También logró vencer a otro Volkswagen Lupo con una potenciación similar, sucumbiendo ante el rey del evento. Porque este Lupo TDI de 500 CV no puede hacer nada contra un Nissan Skyline R32 GT-R con una preparación de drag racing y 1.300 CV de potencia – con un cuarto de milla cronometrado en sólo 8,6 segundos.
Fuente: Carscoops