El CUPRA Ateca es un SUV deportivo, del segmento C, fabricado por CUPRA desde 2018. Se trata del primer modelo de la historia de CUPRA como marca independiente, aunque puede considerarse la versión más prestacional del SEAT Ateca. Este automóvil destaca por un aspecto más agresivo, por un generoso equipamiento de serie y, sobre todo, por la mejor relación entre precio y rendimiento de su categoría. Se fabrica en la planta de Kvasiny, República Checa.
Los principales SUV deportivos de tamaño compacto que pueden considerarse rivales del CUPRA Ateca son el Volkswagen T-Roc R y el Audi SQ2 con los que comparte una gran cantidad de componentes. Fuera de su grupo fabricante, aunque con una tarifa considerablemente superior, se encuentran el Mercedes-AMG GLA 35, el BMW X1 M35i o el MINI Countryman JWC. Todos tienen 300 CV o más y tracción a las cuatro ruedas.
Diseño del CUPRA Ateca
A pesar de su evidente parecido con el SEAT Ateca, pues es el modelo en el que está basado, el diseño del CUPRA Ateca cuenta con parachoques específicos, así como llantas de aleación exclusivas de 19 pulgadas como tamaño estándar, detalles de plástico en color negro brillante y el característico logotipo tribal de la marca española pintado en una tonalidad cobriza. En general, es un vehículo robusto y proporcionado, pero con un acento deportivo que invita a pensar en altas prestaciones.
El CUPRA Ateca tiene unas dimensiones exteriores similares, aunque no idénticas, a las de su equivalente en SEAT. Se diferencia de este por ser un poco más largo y algo más bajo. Así, sus cotas se resumen en 4,39 metros de longitud por 1,84 de anchura y 1,60 de altura, con una distancia entre ejes de 2,63 metros que se traduce en una cabina generosa: apta para cuatro personas grandes. El maletero, por su parte, tiene 485 litros de capacidad, si bien se puede ampliar hasta más allá de 1.500 sin los respaldos traseros.
Motores del CUPRA Ateca
Originalmente, el CUPRA Ateca sólo estaba disponible con un motor 2.0 TSI (gasolina y turboalimentado) que entregaba un máximo de 300 CV de potencia y 400 Nm de par. Esto, en combinación de una transmisión automática de doble embrague y 7 marchas, así como de un sistema de tracción integral mediante diferencial Haldex, le permitía acelerar de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y alcanzar una velocidad punta de 250 km/h. Pese a una masa bruta de 1.625 kg, homologa un consumo medio WLTP de 9 l/100 km.
Sin embargo, a finales de 2023 arrancó la comercialización de una versión más racional y económicamente accesible que, pese a tener la misma configuración (propulsor 2.0 TSI, cambio DSG y tracción 4Drive), desarrollaba 190 CV. Esta variante, a la que no se le concede el distintivo “VZ”, tiene una puesta a punto del chasis parecida, pero pesa 45 kg menos y gasta 7,7 l/100 km en promedio. No obstante, hace el 0-100 km/h en 7,2 s y alcanza 212 km/h. Cualquiera de las dos opciones obtiene la etiqueta C.
Interior del CUPRA Ateca
En el habitáculo del CUPRA Ateca ocurre algo similar a lo que hemos descrito sobre su carrocería: las modificaciones están ahí, pero son más limitadas, y la herencia de SEAT es indudable. De hecho, aunque los materiales son sencillos pero de buena calidad, este es un coche que no puede alardear de excelentes ajustes. Los cambios respecto al Ateca convencional se hallan, sobre todo, en los asientos “baquet”, la instrumentación digital, la tapicería o las molduras de las puertas.
A cambio de ciertas debilidades constructivas con base en el precio que se va a pagar por este vehículo, el CUPRA Ateca viene dotado con una alta carga tecnológica de serie que incluye, entre otras cosas, casi todos los asistentes a la conducción disponibles en su clase, un sistema multimedia de última generación compatible con Apple y Android sin necesidad de usar cables (dos pantallas de 10 y 9 pulgadas respectivamente), un equipo de iluminación ambiental o cinco modos de conducción.
Dinámica del CUPRA Ateca
El secreto del CUPRA Ateca para ser el referente de los SUV deportivos está en su peso, relativamente bajo, y en la puesta a punto de su chasis, relativamente radical. No es un coche muy incómodo, pero prima con claridad la estabilidad sobre el confort. Eso sí, a pesar de un consumo de carburante alto (moderado si se tiene en cuenta su potencia y su basta aerodinámica), resulta agradable y seguro cuando se afrontan largos trayectos por carretera.
Más allá de una suspensión que concede cambios de apoyo muy rápidos sin apenas subviraje, un equipo de frenado resistente (sobre todo en la versión VZ de 300 CV) y una dirección mucho más precisa de lo habitual en este segmento del mercado, este SUV es una compra redonda para quienes buscan un automóvil polivalente con el que se puede salir del asfalto ocasionalmente, aparcar fácilmente en la ciudad y divertirse a lo grande en un puerto de montaña.