El DFSK 580 es un SUV mediano de 7 plazas, del segmento D, fabricado por DFSK desde 2019. Actualmente se comercializa la primera generación, presentada en 2019. El DFSK 580 se caracteriza principalmente por una relación precio-producto demoledora, ya que no hay nada en el mercado de este tamaño (4,68 m) y con su nivel de equipamiento por un precio similar. Se fabrica en la planta de DFSK en China.
Entre los SUV grandes de 7 plazas que pueden considerarse competidores del DFSK 580 tal vez el más parecido podría ser el Peugeot 5008, el Nissan X-Trail o el Skoda Kodiaq, así como otros SUV low-cost como el MG EHS o el Dacia Bigster.
Diseño del DFSK 580
El DFSK 580 llama la atención por un diseño sorprendentemente atractivo, muy del gusto europeo, con unas líneas que recuerdan bastante a un SsangYong Rexton sobre todo en el perfil y la trasera. El conjunto es armonioso, arrancando con un frontal amigable y sencillo y haciendo gala de unas proporciones equilibradas en general.
El diseño del 580 parece pensado para no disgustar a nadie y mezclarse entre el tráfico sin destacar ni para bien ni para mal en ningún aspecto. Desde luego no llama la atención por nada que resulte fuera de lugar para los ojos de un cliente europeo.
Motores del DFSK 580
El DFSK 580 cuenta con una única opción mecánica: un bloque de gasolina turboalimentado con cuatro cilindros y 1.5 litros de cubicaje que ofrece 146 CV y 210 Nm, acoplado a una caja de cambios automática de tipo CVT (variador continuo). Este mismo motor cuenta con la opción bifuel, para funcionar con GLP y, por tanto, obtener la etiqueta ECO de la DGT.
El DFSK existe únicamente como tracción delantera 4×2, renunciando por completo a cualquier uso en campo, a pesar de sus 20 cm de altura libre al suelo que sí nos servirán para circular por caminos en buen estado, pero muy poco más. Esta es una diferencia notable respecto al SsangYong Rexton, cuyo enfoque es mucho más campero contando con tracción 4×4 conectable y reductora, aunque también con un precio más elevado.
Interior del DFSK 580
El interior del DFSK 580 nos recuerda de nuevo muy claramente al diseño del SsangYong Rexton, con el mismo estilo, sensación general y distribución de mandos, controles y aireadores, que el DFSK adorna con piel y símil madera en asientos, puertas y salpicadero. Si nos guiamos por el precio ajustado del 580, cabe suponer que los plásticos serán de una calidad inferior a la de cualquier marca Premium, pero lo cierto es que el aspecto es bastante convincente.
El cuadro de mandos es analógico con dos grandes relojes y un ordenador central multicolor, mientras que la pantalla central del salpicadero es muy grande (11 pulgadas) y cuenta con el acabado justo y necesario para que no falte nada imprescindible, pero sin llegar al refinamiento de sus rivales de otras marcas. Lleva faros halógenos (no LED), control de crucero (no adaptativo), climatizador automático, sensores de aparcamiento y cámara trasera (pero no perimetral 360). Si obviamos los asientos de piel y el techo panorámico, lleva un equipamiento sencillo equiparable a las versiones básicas de sus rivales generalistas.
Dinámica del DFSK 580
El DFSK 580 es un coche que ofrece un comportamiento noble y confortable, es un coche sin aspiraciones dinámicas, pero muy adecuado para circular tranquilamente por ciudad y carretera. Su puesta a punto, donde destaca el uso de una suspensión y una dirección blandas, lo hacen un coche donde se perciben claramente las inercias de la carrocería. Del mismo modo, el aislamiento no es su fuerte, siendo bastante perceptible el ruido del motor.
No es un coche muy pesado para su tamaño, superando apenas la tonelada y media en vacío, lo que hace que su motor de 146 CV sea suficiente para circular a ritmos legales con total fluidez, con una velocidad punta de 190 km/h y un consumo medio homologado de 7,3 l/100km, tal vez algo elevado pero no escandaloso. El cambio automático CVT contribuye a una conducción suave sin cambios de marchas, pero lo aleja todavía más de cualquier pretensión prestacional.