El Infiniti QX50 es un SUV de gama alta y de dimensiones generosas. Un producto creado por Infiniti, marca japonesa y filial de lujo de Nissan, para competir sobre todo con otros premium europeos, como el Audi Q5, el BMW X3, el Mercedes GLC, o incluso el Volvo XC60.
Este nuevo modelo de Infiniti ocupará el lugar en el que antaño se situaba el Infiniti EX. Y eso significa, para que nos hagamos una idea de su posicionamiento dentro de la gama Infiniti, que será más grande y caro que un Infiniti QX30, pero también más corto y asequible que un Infiniti QX70, antaño conocido como Infiniti FX.
El Infiniti QX50 y el motor de compresión variable
Una de las grandes sorpresas de este modelo, y la razón por la cual debería figurar en los libros sobre la historia del automóvil, es que será el primer coche de producción que cuente con un motor capaz de variar la relación de compresión a la que trabaja. Los motores de compresión variable son una tecnología en la que muchos fabricantes han trabajado desde hace años, uno de los Santos Griales de los motores de combustión interna.
Para variar la compresión es necesario ajustar y variar, en caliente, la carrera del cilindro. Al variar la compresión del motor, se puede conseguir que este también ajuste sus prestaciones y su rendimiento a situaciones muy diferentes. Con su relación de compresión más baja este motor sería capaz de desarrollar sus mejores prestaciones posibles, mientras que con una relación de compresión alta, conseguiríamos la mayor eficiencia posible.
Para variar la carrera del cilindro, y por ende la compresión del motor, es necesario un dispositivo que regule la posición del cilindro en su punto muerto inferior. Hace años, General Motors trabajó en un motor de compresión variable que para conseguir su objetivo contaba con una culata articulada, pero su coste y complejidad hicieron que jamás llegara a comercializarse. Infiniti ha conseguido su objetivo con un dispositivo más sencillo, un brazo articulado – denominado Harmonic Drive – que pivota para controlar el recorrido de los cilindros.
2.0 VC-Turbo: el primer motor de compresión variable de la historia
El motor que utilizará el Infiniti QX50 ha sido denominado como 2.0 VC-Turbo. Es un bloque de cuatro cilindros, que además de su sistema de compresión variable, cuenta con turbo. Entrega 272 CV de potencia y un par máximo de 380 Nm, con la pretensión de ofrecer unas prestaciones superiores incluso a la de los motores V6 atmosféricos que durante años utilizó Infiniti, con unos consumos ínfimos, que la marca asegura serán propios de un diésel de cuatro cilindros.
Sabemos que este coche, y con este motor, será capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en el entorno de los 6,5 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 230 km/h.
El Infiniti QX50 y la conducción autónoma de ProPILOT
Otra de las grandes novedades de este Infiniti QX50 será la introducción de la última versión del sistema ProPILOT de Nissan. Nissan lleva desarrollando desde hace años una tecnología de ayudas a la conducción avanzadas, cuyo objetivo final es conseguir un coche completamente autónomo. La última versión de ProPILOT, presente en este Infiniti, ya ha conseguido automatizar la conducción en autopista en un único carril, automatizando por completo tareas como acelerar, frenar, mantener la distancia con el coche que nos precede, o incluso girar. Pero aún no permite funciones más avanzadas, que sí hemos visto en las tecnologías de marcas como Tesla o Mercedes-Benz, como automatizar los adelantamientos.
¿Cuándo llegará a los concesionarios el Infiniti QX50?
El Infiniti QX50 se estrenará en Estados Unidos el año que viene, para llegar poco después a los concesionarios europeos y situarse en el espacio que queda entre Infiniti QX30 e Infiniti QX70.