El Jaguar F-Type es un deportivo biplaza, fabricado por Jaguar desde 2013. Actualmente se comercializa la primera generación, que fue actualizada a finales de 2019. Es considerado el heredero espiritual del icónico Jaguar E-Type, uno de los mejores clásicos de la marca. El Jaguar F-Type se fabrica en la planta de Jaguar, de Birmingham (Reino Unido).
Entre los coches deportivos que rivalizan con el Jaguar F-Type podemos encontrar los Porsche 718 Cayman y 718 Boxster, y los motores más potentes rivalizan con modelos como el Porsche 911 o el Mercedes AMG-GT.
Diseño exterior del Jaguar F-Type
El Jaguar F-Type es un deportivo de diseño muy agresivo, pergeñado por Ian Callum a partir del prototipo C-X16. Guarda las proporciones clásicas de un deportivo biplaza, con un capó muy largo, un habitáculo muy retrasado -el conductor se sienta casi sobre el eje trasero– y voladizos muy cortos en ambos extremos del coche. Su limpieza de líneas y el cuidado aspecto de sus ópticas – especialmente las traseras- le han granjeado muchos premios de diseño, con beneplácito de crítica y público.
Sus proporciones musculosas pero elegantes, junto con unas dimensiones no especialmente generosas (mide 4,47 metros de largo, 1,92 de ancho y 1,31 metros de alto) hacen que el Jaguar F-Type destaque entre tanto SUV alto y voluminoso. Detalles como los tiradores de las puertas enrasados y retráctiles eléctricamente o la sutil aleta de tiburón que hace las funciones de ante realzan aún más un conjunto en el que el equilibrio es innegable.
Motores del Jaguar F-Type
La oferta de propulsores disponible en el Jaguar F-Type está compuesta por un 2.0 Turbo de 300 CV y 400 NM, y un 5.0 V8 Supercharged con dos niveles de potencia: 450 CV o 575 CV. En el caso de las versiones V8 es posible instalar un sistema de tracción total: opcional en el V8 de 450 CV y de serie en el V8 de 575 CV. En cualquier caso, siempre tendremos que optar por una transmisión automática de 8 velocidades, sin opción a caja de cambios manual.
No son motores especialmente gastones, aunque eso sí, no hay ni rastro de electrificación alguna, de manera que todos los Jaguar F-Type reciben la etiqueta C de la DGT. Es un pequeño inconveniente que tiene como recompensa el poder disfrutar de uno de los sonidos más atractivos del mercado actual.
Interior del Jaguar F-Type
El interior del Jaguar F-Type tiene un diseño que cumple con creces las expectativas, aunque los acabados no están tan bien rematados como en modelos alemanes, por ejemplo de Porsche. El sonido al cerrar las puertas lo delata o el tacto de algún control del salpicadero pueden resultar algo decepcionantes en comparación con algunos de sus rivales, pero en ningún caso supone un problema que pueda decidir la compra en uno u otro sentido.
Un detalle interesante es el sistema de ventilación inteligente con salidas de climatización que emergen del salpicadero a demanda. El Jaguar F-Type cuenta eso sí con una carga tecnológica más que suficiente para los estándares actuales, destacando la presencia de elementos como el cuadro de instrumentos totalmente digital con 12,3″ o el sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil y compatibilidad con Apple CarPlay o Android Auto.
Dinámica del Jaguar F-Type
Construido con una estructura de aluminio ligero pero muy rígido, el F-Type logra una combinación más que buena de peso reducido y resistencia, proporcionando una base sólida para una conducción ágil y comunicativa. Su suspensión está construida haciendo uso de paralelogramos deformables en ambos ejes, y la distribución casi 50/50 del peso contribuye también a ofrecer una experiencia de conducción acorde a lo que se espera de la imagen que transmite el modelo inglés.
Destaca también la presencia de un sistema de frenos con pinzas fijas de hasta 6 pistones dependiendo de la versión, permitiendo así unas deceleraciones y un tacto acorde a la velocidad que es capaz de alcanzar. En cualquier caso, aquellos potenciales clientes que busquen en el Jaguar F-Type un deportivo de pura raza podrán llegar a decepcionarse, siendo su talante el de un Gran Turismo con un ajuste muy deportivo que, eso sí, permite realizar largos viajes.