El Land Rover Discovery es un todoterreno, del segmento E, fabricado por Land Rover desde 1989. Actualmente se comercializa la quinta generación, presentada en 2017. El Land Rover Discovery se caracteriza por su compromiso como vehículo lúdico con un despliegue en tecnologías y asistencias a la conducción a la altura de las grandes berlinas premium. Se fabrica desde 2018 íntegramente en la planta de Nitra en Eslovaquia.
De esta manera, el Land Rover Discovery aspira a rivalizar con modelos como el Audi Q7, el Volvo XC90 o el BMW X5, aunque bien es cierto que estas opciones destacan por un enfoque que prima el confort y el uso en entorno principalmente urbanos. Para encontrar opciones con mejores cualidades fuera de asfalto tenemos que optar por todoterrenos como el Jeep Grand Cherokee, el Toyota Land Cruiser o el Ineos Grenadier.
Diseño exterior del Land Rover Discovery
La imagen del Land Rover Discovery viene marcadas por unas líneas elegantes, acompañadas de una clara diferenciación respecto a la estética exterior de su predecesor. Más grande y espacioso, su aspecto tiene como claros protagonistas la mirada afilada de las ópticas delanteras con tecnología LED y el característico pilar C, tras el que se prolonga el techo para dar cabida a la tercera fila de asientos y que en gran parte nos recuerda a otros modelos del fabricante británico como los Land Rover Discovery Sport. En la zaga, el diseño asimétrico del portón nos deja la matricula desplazada a la izquierda, de forma mucho más disimulada que en el Discovery de cuarta generación.
Diseño recatado y atractivo en el que se combinan detalles de un vehículo premium como la imagen de techo flotante o el spoiler trasero con las llantas de 19 pulgadas, que ponen un claro contrapunto para lo que según Land Rover es uno de los todoterrenos más válidos fuera del asfalto.
Motores del Land Rover Discovery
El Land Rover Discovery hace gala de un elenco de motores apto para afrontar duras rutas off-road y, al mismo tiempo, cumplir con las medidas anti-contaminación. Así lo demuestra con una gama conformada por dos variantes diésel mild-hybrid y su correspondiente etiqueta ECO, y una gasolina con mismo sistema.
De esta forma, nos encontramos con el Discovery D250 MHEV, variante que recurre a un propulsor de seis cilindros en línea y 3.0 litros sobrealimentado por turbo que produce 249 CV y 570 Nm de par. El siguiente escalafón está conformado por el D300, versión que recurre al mismo motor pero que eleva la potencia hasta los 300 CV y 650 Nm de par.
Por último pero no por ello menos importante, el Discovery P360, o lo que es lo mismo, un seis cilindros gasolina de 3.0 litros sobrealimentado por turbo que produce 360 CV y 500 Nm de par. Al igual que el resto de motores, esta variante del 4×4 inglés hace gala de un sistema micro-híbrido, el cual le proporciona la etiqueta ECO de la DGT.
Diseño interior del Land Rover Discovery
El interior del Land Rover Discovery destaca por combinar con suma maestría el minimalismo con la última tecnología y mandos físicos. Dicha combinación la descubrimos rápidamente a través de un cuadro de mandos digital de 12,3 pulgadas que muestra toda la información necesaria de manera sutil y elegante, aunque se echa en falta un punto más de personalización.
El volante es completamente redondo y presume de mandos físicos para el sistema multifunción. Pero la inequívoca protagonista es una pantalla táctil de 11,4 pulgadas con conexión con Apple CarPlay y Android Auto. A ello debemos sumarle mandos físicos para la climatización que, a su vez, tienen diferentes funciones. Y es que el 4×4 inglés esconde en un mismo mando la calefacción del asiento y el caudal del aire, por ejemplo.
Por otra parte, los ajustes y materiales empleados para concebir el habitáculo del Land Rover Discovery son de primer nivel, dejando que cuero e inserciones de todo tipo recubran todos los recovecos. A ello hay que sumarle una generosa segunda fila de asientos y la posibilidad de añadir una tercera fila de asientos que como punto negativo presentan la erradicación casi total del maletero.
Y es que con cinco plazas, el Discovery declara un total de 723 litros de maletero, capacidad que se reduce hasta unos mucho más modestos 172 litros.
¿Cómo va dinámicamente el Land Rover Discovery?
En Diariomotor hemos tenido la oportunidad de probar el Land Rover Discovery. Estamos ante un coche que en el asfalto deja patente un excelente confort de marcha, pero no puede evitar sacar a relucir su peso y envergadura, especialmente en curva, donde las inercias son bastante acusadas.
Pero donde realmente destaca el todoterreno inglés es en conducción off-road. Y es que cuando salimos de la carretera el Discovery hace gala de una gran cantidad de sistemas para afrontar duras rutas que puede doblegar sin despeinarse y siempre y cuando no tengamos miedo de manchar un coche de su talante.